El presidente de la Región de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, y el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, han reivindicado un gran pacto nacional que acabe con las guerras del agua en España y han expresado su “firme defensa” del trasvase Tajo-Segura, porque, según indicó Pedro Antonio Sánchez, es una infraestructura “de solidaridad y vertebración del país”.
Ambos mandatarios han mantenido su primera reunión institucional en el Palacio de San Esteban para tratar diversos asuntos de “interés común”, como la necesidad de un gran Pacto Nacional del Agua.
Sobre el trasvase Tajo-Segura, Pedro Antonio Sánchez ha reiterado que el Gobierno murciano ya ha expresado “con absoluta rotundidad” que el trasvase tiene que seguir vigente. Ha recordado que está regulado por la Ley del Memorándum, aprobada en la Cortes Generales y que establece las reglas de explotación, y ha asegurado que “vamos a estar vigilantes en el cumplimiento de ese marco legal”.
Además, según Pedro Antonio Sánchez, el trasvase es una infraestructura que influye “de forma determinante en la creación de empleo en la Región”, al ser el agua un recurso imprescindible para la agricultura, un sector del que dependen 100.000 familias en la Región.
En este sentido, los presidentes de ambas comunidades han hecho un llamamiento al consenso para alcanzar un gran Pacto Nacional del Agua. “Un llamamiento sincero para que a través del diálogo lleguemos a un acuerdo que dé lugar a ese Pacto Nacional del Agua que resuelva definitivamente los problemas de déficit hídrico de una parte importante del país”, ha dicho el presidente de la Región de Murcia, quien ha remarcado que “éste es un asunto de Estado”.
