El recién elegido nuevo presidente de la Federación de Caza de Castilla-La Mancha, Agustín Rabadán, ha fijado la mejora del estado de la perdiz roja como el trabajo más inmediato que debe acometer este organismo.
Tras ser elegido, Rabadán ha indicado que para ello “son necesarios estudios e investigación y la colaboración de las instituciones cuya implicación reivindico, pues la investigación y la formación son elementos cada vez más necesarios para el ejercicio de nuestra actividad, así como otras medidas como políticas agrarias que hagan compatible la actividad agrícola con las especies cinegéticas”.
La perdiz roja, una especie emblemática en numerosas comarcas de Castilla-La Mancha, ha descendido alarmantemente el número de ejemplares en los últimos años por causa del aumento de la mortalidad y el descenso de la reproductividad.
Entre los factores de esta situación están la disminución y deterioro de los recursos naturales y alteración de su hábitat debido a, principalmente, abandono de zonas rurales y usos tradicionales del monte; ganadería intensiva; sobreexplotación cinegética; repoblaciones de perdices criadas en cautividad; climatología adversa o determinadas prácticas agrarias (transformaciones agrícolas y uso de plaguicidas y fitosanitarios).
Control de pedradores
Otra cuestión importante, ha afirmado, “será culminar el proceso de homologación de los métodos de control de predadores, tan demandados por el sector cinegético y tan necesarios para el mantenimiento de las especies”.
