Agricultores de Marchamalo (GU), preocupados por salida de camino a CM1008

A petición de APAG tuvo lugar ayer un encuentro entre el director provincial de Fomento, Julio Calle, el alcalde de Marchamalo, Rafael Esteban, el secretario general de APAG, Antonio Torres, los responsables del Centro Agrario, el presidente de la Asociación de Agricultores de Marchamalo, Fernando Ayuso y varios agricultores de la localidad buscando soluciones al problema que supone la salida de uno de los caminos rurales a la CM 1008 – (Ctra. de la patata).

Los agricultores tienen que salir con sus tractores y maquinaria, sin visibilidad, debido a unos invernaderos pegados a la vía, e incorporarse a una carretera con gran tráfico y a gran velocidad, en un ángulo de 90 grados.

Ya ha habido varios sustos y accidentes en este punto, asegura Fernando Ayuso y los agricultores están bastante preocupados, por lo que después de advertir del problema recurrieron a APAG, que se puso en contacto con Fomento.

También los 60 trabajadores del Centro Agrario de Marchamalo se ven afectados por este problema, ya que la entrada a la Escuela se encuentra prácticamente enfrente y los empleados entran y salen continuamente con tractores y con maquinaria al citado camino

La CM-1008 o carretera de la Vega (coloquialmente llamada carretera de la Patata) transcurre entre Azuqueca de Henares y Fontanar. Pertenece a la Red de Carreteras de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Gran parte de su trazado se construyó ampliando el antiguo camino asfaltado que unía Fontanar y Alovera por Marchamalo y Cabanillas del Campo.

El tramo entre Marchamalo-Fontanar, abierto en 2008, abarca 5 km. construidos sobre el recorrido anterior de la carretera de la Patata. En la actualidad el flujo de tráfico en esta vía es muy elevado y a pesar de estar limitado en el punto citado a 70 km/h. muchos vehículos, incluidos camiones superan esta velocidad.

Asi se pudo comprobar in situ ayer, en este punto donde el director provincial de Fomento, destacó la peligrosidad de esta entrada-salida y se comprometió a tomar medidas, en primer lugar de mejora de la señalización y de reducción de la velocidad probablemente con bandas transversales. También se va a estudiar actuar sobre el camino, para moverlo o bien ensanchar la salida de manera que la incorporación se pueda hacer en diagonal, la última solución planteada sería mover los invernaderos.

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