CHG informa a regantes de la situación de alerta por sequía

Representantes de la Confederación Hidrográfica del Guadiana se han reunido este martes en Ciudad Real con miembros de las comunidades de regantes de Peñarroya, el Vicario, Torre de Abraham y Gasset

Representantes de la Confederación Hidrográfica del Guadiana se han reunido este martes en Ciudad Real con miembros de las comunidades de regantes de Peñarroya, el Vicario, Torre de Abraham y Gasset a fin de analizar la situación de los embalses de sus respectivas  zonas y que estas comunidades de regantes puedan trasladar, con detalle, a los usuarios dicha información.

Desde la CHG señalan que esta reunión se hace necesaria dada las escasas aportaciones a los embalses que se han venido registrado en los últimos meses y al objeto de planificar la próxima campaña de riego en función a los recursos almacenados en los mismos; teniendo en  cuenta  la  totalidad  de  los  usos,  particularmente la  de  aquellos,  como  los abastecimientos que deben ser atendidos con total garantía en los dos próximos años.

El objetivo fundamental es informar para así prevenir y alertar por si las previsibles precipitaciones hasta el  inicio  de  campaña  no  fueran  suficientes  y  nos encontráramos ante un cuarto año consecutivo seco.

Con esta reunión la CHG pretende dar una información constante de las expectativas de caudales existentes  para el próximo verano en las zonas regables de Peñarroya, el  Vicario,  Torre  de  Abraham  y  Gasset,  y  que  los  regantes,  con  los  recursos almacenados y los previsibles de un año de sequía, puedan adoptar sus mejores  decisiones de siembra, en función de  los datos de los que dispone el Organismo de cuenca, de la forma más  responsable a fin de evitar llevar a cabo inversiones que difícilmente tendrían resultados satisfactorios.

No obstante el Organismo de Cuenca quiere hacer constar que los datos aportados  y  previsiones realizadas van dirigidas  a  las zonas regables dependientes de embalses; lo referente a extracción de  aguas subterráneas será como en años anteriores.

Las previsiones dadas a los regantes se refieren a un año de sequía y son las más prudentes ya que corresponden a aportaciones de la media de los dos años más secos;  con  la  esperanza  de  que  las  condiciones  meteorológicas  no  sean  tan negativas y las condiciones de caudal, hoy previsibles, sean ampliamente superadas.

En estas hipótesis  tan  restrictivas hay que destacar que los abastecimientos dependientes de estos embalses quedan asegurados para los dos próximos años.

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