La Unión General de Trabajadores en Castilla-La Mancha ha valorado los datos del paro arrojados este jueves concluyendo que hay “más trabajadores y familias pobres”, así como que la región sigue “inmersa en una gran estacionalidad en la economía” pues la subida del mes de febrero se debe “al fin de las campañas agrícolas”, algo que explica además que se haya producido un aumento del “paro masculino”.
Según la secretaria de Empleo, Salud Laboral e Igualdad UGT en la región, Matilde Jiménez, “la situación se mantiene, sigue el paro, la precariedad laboral, la baja contratación, contratos a tiempo parcial, y muy escasa contratación indefinida a jornada completa. El número de cotizantes a la Seguridad Social tampoco se dispara al alza, ni mucho menos”, ha informado el sindicato en nota de prensa.
A juicio de Jiménez, las cifras “son claras” y “evidencian el carácter momentáneo y estacional de la generación de empleo con una elevada dosis de precariedad de los contratos registrados”. Además, el sistema otorgado entre patronales y gobiernos “produce vidas a tiempo parcial y futuro incierto”.
Asimismo, ha achacado que las mayores subidas se hayan producido en Toledo y Ciudad Real —428 y 473 parados más, respectivamente— al fin de la campaña de la aceituna. Por el contrario, el repunte al alza en Albacete tiene que ver “con el sector servicios”.
Más inversión en políticas activas de empleo
Desde UGT han insistido en aumentar la inversión en políticas activas de empleo, incrementar y mejorar la formación. Del mismo modo, han señalado como “imprescindible “la creación de Oferta Pública de Empleo, con tasas de reposición que garanticen el funcionamiento de los Servicios Públicos.
Por último, ha abogado por “asegurar la protección social a todos los desempleados con una renta mínima garantizada vía prestación no contributiva; revisar los criterios de acceso a programas de activación para el Empleo; y que no se queden fondos sin gastar como en años anteriores”.
En lo que se refiere a de los Planes Extraordinarios de Empleo, ha pedido al Ayuntamiento de Guadalajara y la Diputación de Cuenca que “reconsideren su postura” de desmarcarse de dicho Plan para que pronto “puedan paliar la grave situación que viven muchas familias en Castilla La Mancha”.
