La Diputación Provincial de Cuenca ha presentado alegaciones al anteproyecto del Servicio Integrado de Transporte Público de Viajeros por Carretera en La Serranía Alta y La Alcarria con el fin de que “el Gobierno de Castilla-La Mancha subsane los olvidos y errores que ha cometido y que van en detrimento de algunos núcleos de población de estas zonas de la provincia de Cuenca”, tal y como ha señalado el diputado de Fomento, Javier Parrilla, que
este jueves se encargaba de registrarlas en el Registro Único de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en Cuenca.
Y es que para Parrilla no es de recibo que “se incluyan en este modelo de servicio de transporte de viajeros por carretera a puntos como Embid, Caracena del Valle o Albaladejito y, sin embargo, se deje fuera al municipio de Bascuñana de San Pedro y a pedanías como Molinos de Papel, La Langa, Sotoca, Tondos, Arcos de la Cantera, Cólliga, Colliguilla, Villanueva de los Escuderos, Valdecabras, Huerta de Marojales e, incluso, varios barrios de Vega del Codorno”.
Es por ello que Diputación pide en sus alegaciones que se les incluya en este anteproyecto con el fin de “garantizar que se les vaya a prestar el servicio y evitando que haya ciudadanos de primera y de segunda en estas zonas de la provincia”, indica Parrilla.
Y es que, a su juicio, no es nada complicado solucionar estos errores, máxime, por ejemplo, si se tiene en cuenta que en el caso de Molinos de Papel la ruta hacia Palomera pasaría por este núcleo y tan solo sería cuestión de fijar una parada o en el caso de Bascuñana de San Pedro, que se encuentra a 6 kilómetros de la N-320 por donde pasarán cuatro de las líneas contempladas en este nuevo mapa de servicios.
Asimismo, la Diputación alerta en sus alegaciones sobre la existencia de varias rutas en las que, aun pasando por municipios o núcleos, no figura parada alguna en ellos, esconociéndose si hay alguna razón técnica o de cualquier otro tipo que impide contemplarla, aunque sea a demanda. Tal es el caso, por ejemplo, de Portilla por donde discurre la ruta Arcos de la Sierra-Villalba de la Sierra y, sin embargo, no hay parada contemplada.
Entre estas alegaciones, también se llama la atención sobre la necesidad de exigir un mínimo de vehículos adaptados para que las personas en silla de ruedas puedan acceder a este servicio de transporte y así, aunque sea a demanda, se garantice que cualquier persona con movilidad reducida pueda disponer del mismo derecho que cualquier otro ciudadano.
