Los vinos de la DO La Mancha han participado en los Encuentros Diplomáticos organizados desde el Grupo Planeta, en los que participó el embajador de China y en los que también se dejaron ver algunas autoridades como el Secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Ildefonso Castro y rostros conocidos como el Presidente del Altético de Madrid, Enrique Cerezo, (club con parte de su capital chino).
Los vinos DO La Mancha estuvieron presentes en estos encuentros como colaboradores económicos del acto, junto a la compañía de viajes Catai y el Consorci Zona Franca Barcelona.
Hoy China es con 8.386.536 botellas, el principal cliente de los vinos con Denominación de Origen La Mancha. Esas buenas relaciones comerciales tuvieron su matiz diplomático el pasado 24 de abril en la sede del diario La Razón, en Madrid. Allí acudió el embajador de China en España, Lyu Fan, para repasar los principales asuntos de mayor interés en la órbita internacional, las relaciones bilaterales China-España y el papel del gigante asiático para el marco del Pacífico.
Al cierre del acto, el centenar de personas asistentes pudieron además degustar los vinos DO La Mancha, durante el cóctel de una manera más distendida y relajada. Un nutrido grupo de periodistas chinos se interesó por los tintos tempranillo además de apreciar la frescura del blanco airén, muy oportuna para sofocar la cálida jornada primaveral en la ciudad de Madrid.
China, potencia económica mundial, con una liderazgo clave en el continente asiático, en los últimos 15 años, ha experimentado uno de los cambios estructurales más sustanciales en el conjunto de la economía mundial. Fundada en 1949, la República Popular de China ha aumentado vertiginosamente su población mundial de los 500 a los 1.400 millones de habitantes. Su apertura al comercio internacional, desde un “socialismo con peculiaridades propias”, como lo definió durante los encuentros el embajador de China, ha tendido nuevos canales de cooperación económica entre sendos continentes.
También el vino ha sabido vislumbrar las oportunidades de negocio, dicen desde la DO, en un mercado donde la demanda de vino en el consumidor de la Gran Muralla casi se ha triplicado.
