Jóvenes agricultores italianos, conocen el modelo de APAG-Coagral, en Guadalajara

Miembros de la organización agraria italiana Coldiretti

Un grupo de estudio de jóvenes agricultores, miembros de la organización agraria italiana Coldiretti, -la más importante del país- ha realizado una visita a APAG y su SAT Coagral para conocer el funcionamiento de la organización y compartir su experiencia en el tema de la comercialización agroalimentaria.

El secretario general de la Asociación Provincial de Agricultores y Ganaderos y gerente de Coagral, Antonio Torres, presentó la experiencia comercial de la SAT desde sus inicios, con la venta de fertilizantes y semillas, hasta el actual centro comercial profesional con más de 1.500 metros cuadrados y decenas de secciones y la Tienda de Productos de la Tierra. Además situó a los visitantes con datos sobre la realidad agraria provincial de Guadalajara.

Tras la jornada de trabajo, el grupo visitó detenidamente las instalaciones de la sede central de APAG, -oficinas, silos, almacenes, naves, e hipermercado- y se desplazó hasta Yunquera de Heares para realizar un visita a las instalaciones de APAG en esta localidad.

La representación estaba formada por 11 personas entre agricultores y técnicos, miembros de la asociación Coldiretti, de la provincia italiana de Padova, en la región de Veneto. Esta organización cuenta con más de un millón de socios y representa al 70% de la agricultura italiana, con presencia en todos los ámbitos (granjas, cooperativas, mercado de productores agrarios, etc.).

El grupo vino acompañado del responsable de jóvenes agricultores, Paolo Minella, y el responsable de Forrmación, Stefano Menara, quienes explicaron el esquema de su organización, que cuenta con cerca de un centenar de sedes provinciales, en el país y una veintena de federaciones regionales. Esta organización trabaja con el objetivo de que la mayor parte de la cadena de valor de un producto se quede en el productor, y para ello han puesto en marcha varios proyectos, como los mercados directos, sobre todo para la comercialización directa de frutas y hortalizas. Además, han logrado cambiar la mala imagen que existía en Italia de la agricultura hace 10 años, han promovido leyes a favor de sus productos y han aplicado normas de etiquetado para triunfar en el mercado.

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