El vicepresidente de las Cortes de Castilla-La Mancha y diputado del PP, Santiago Lucas-Torres, ha reclamado este miércoles explicaciones al consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, sobre la falta de apoyo real a los jóvenes agricultores y la “dejadez” del Gobierno regional en garantizar su incorporación al sector.
Lucas-Torres ha recordado que organizaciones como APAG-Asaja Guadalajara y Unión de Uniones han denunciado reiteradamente las “promesas incumplidas” de la Junta de Comunidades en este ámbito, dejando a muchos jóvenes sin ayudas y sin la posibilidad de iniciar su actividad agraria.
Trabas burocráticas
Por ello, el vicepresidente de las Cortes regionales ha planteado directamente al consejero la siguiente pregunta: “Tras las denuncias de APAG-Asaja Guadalajara y Unión de Uniones sobre la falta de apoyo real a los jóvenes agricultores y las promesas incumplidas en su incorporación al sector, ¿qué medidas concretas va a tomar su Consejería para garantizar que estos jóvenes puedan acceder a las ayudas y establecerse en la agricultura sin trabas burocráticas ni recortes presupuestarios?”.
Lucas-Torres ha advertido que la “inacción” del Gobierno de Emiliano García-Page está poniendo “en grave riesgo” el futuro del sector agrario, ya que sin relevo generacional la viabilidad de la agricultura y la ganadería en Castilla-La Mancha “está en peligro”.
“El Gobierno regional no puede seguir mirando hacia otro lado mientras cientos de jóvenes ven frustradas sus expectativas de incorporarse al sector. Castilla-La Mancha no puede permitirse perder a estas nuevas generaciones de agricultores y ganaderos por culpa de la falta de compromiso de la Junta”, ha denunciado el diputado.
En este sentido, ha exigido a la Consejería de Agricultura un compromiso claro y medidas urgentes para garantizar que ningún joven con vocación agraria se quede sin oportunidades por culpa de “la mala gestión” del Ejecutivo autonómico.
Lucas-Torres ha anunciado que seguirá reclamando soluciones efectivas en las Cortes para que la Junta asuma su responsabilidad y ponga en marcha un plan realista y bien financiado que asegure el relevo generacional en el campo castellano-manchego.