La Junta Directiva de la Asociación Agraria-Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Ciudad Real ha lamentado el “grave problema” que se ha generado en las resoluciones de las últimas convocatorias de Reestructuración e Incorporación de viñedo de Castilla-La Mancha, convocadas por la Consejería de Agricultura.
Falta de presupuesto
Desde la organización agraria han detallado que el origen del problema ha estado en la falta de presupuesto para abordar todas las solicitudes presentadas (prácticamente el doble).
A esto se ha sumado la introducción de un criterio de puntuación para priorizar a las zonas despobladas. Algo que para la organización agraria “como idea es positivo, pero no lo han sabido llevar a la práctica”.
Como resultado se han quedado fuera la mitad de las solicitudes presentadas, pertenecientes a numerosos agricultores profesionales, de localidades con mayor población, pero eminentemente vitivinícolas; y 600 jóvenes de la región con inquietud de incorporarse a la actividad agraria.
Una vez que la organización advirtió el problema, planteó dos posibles vías de actuación: la de los recursos administrativos o la negociación.
Error de previsión de fondos
Finalmente, se ha logrado evitar dilatar el asunto varios años gracias a la presión ejercida por ASAJA y a la disposición de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, por querer dar una solución tras reconocer el error de previsión de fondos en las convocatorias.
Según indica ASAJA, el consejero, Julián Martínez Lizán, se ha comprometido con el sector a recuperar a los afectados en las nuevas líneas de estas ayudas, duplicando el presupuesto para la Incorporación e inyectando más fondos para la Reestructuración.
A partir de ahora, ASAJA estará vigilante para que se cumplan los compromisos adquiridos con los agricultores y jóvenes perjudicados.
La organización agraria ya ha exigido que las ayudas lleguen adecuadamente y ningún aspirante se quede fuera, así como que no haya criterios de desigualdad.
Además, ha pedido a Agricultura que centre sus esfuerzos en poner todos los recursos y medios disponibles para que se resuelvan con agilidad estas convocatorias, asumiendo las inversiones que ya han realizado los afectados.