Castilla-La Mancha va a defender que las principales partidas exportadoras de la región a Estados Unidos se incluyan en la posible exención del ‘arancel cero’ dentro del acuerdo negociado entre la Administración Trump y la Unión Europea, que grava con un 15 por ciento de manera general las exportaciones de los países comunitarios al territorio estadounidense.
Así lo han remarcado la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, y el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, que han presidido este martes una nueva reunión del Observatorio Regional del Impacto de los Aranceles (ORIA), en el que el Ejecutivo y agentes sociales, empresas y entidades representativas de los sectores más afectados han analizado el acuerdo alcanzado este fin de semana en Escocia.
Sacar los productos agroalimentarios de las guerras comerciales
Martínez Lizán ha comenzado su exposición defendiendo, una vez más, la necesidad de sacar los productos agroalimentarios de las guerras comerciales “porque todo esto, lo que supone es el incremento de la cesta de la compra precisamente para las personas más vulnerables y las familias que más difícil lo tienen”.
El consejero ha indicado que habrá que esperar para conocer la “letra pequeña” y saber ver cómo afecta finalmente a Castilla-La Mancha el acuerdo comercial que de manera general pauta aranceles del 15 por ciento para las exportaciones europeas, pero que contempla también el llamado ‘arancel cero’ para determinadas partidas, “que queremos hacerlo efectivo a las producciones de Castilla-La Mancha”.
Esta falta de información sobre la totalidad del acuerdo también provoca incertidumbre acerca de los aranceles a los insumos que se emplean en las producciones agronómicas, que por esta vía también se podrían ver afectadas, por tanto “cuando tengamos todos esos datos podremos ser capaces de analizar realmente cómo va a afectar a nuestra región”.
por esta vía también se podrían ver afectadas, por tanto “cuando tengamos todos esos datos podremos ser capaces de analizar realmente cómo va a afectar a nuestra región”.
Exportaciones agroalimentarias de Castilla-La Mancha
Julián Martínez Lizán ha explicado que las exportaciones agroalimentarias de Castilla-La Mancha a Estados Unidos están en el entorno de los 160 millones de euros, lo que supone 30 millones más que el año anterior, mientras que “les compramos 70 millones, por tanto, nuestro balance comercial es positivo, algo que se ha venido incrementando constantemente”, si bien ha advertido que, de forma indirecta puede haber repercusiones, “principalmente por el vino que vendemos a otros países y que pueden utilizar otras vías diferentes de llegada a Estados Unidos, y que puedan colonizar mercados que en este momento está utilizándose por parte del mercado español para la venta en terceros países”.
“En este sentido yo creo que nuestra apuesta tiene que basarse en buscar nuevas vías de venta de productos, nuevos clientes. Nuestro vino llega a más de 147 países en el mundo y además se ofrece una oportunidad importante con el acuerdo de Mercosur, donde Brasil puede ser un potencial cliente en el que tenemos que trabajar y hacer campañas de promoción. En resumen, tenemos que aprovechar la calidad de todas las producciones alimentarias que tenemos para ponerla como bondad a la hora de vender y que tengan atractivo”, ha dicho el consejero.
Bajada de los precios
Otro elemento que ha analizado el consejero es la propia dinámica del mercado, en el que han bajado los precios de productos como la leche de oveja manchega y el aceite de oliva “algo que pone de manifiesto que, aún con el incremento de aranceles, tendrán que ser más barato todavía para los consumidores estadounidenses; de esa manera no tiene por qué ponerse en riesgo el tránsito comercial que en estos momentos tenemos”.
Julián Martínez Lizán ha reiterado que las exportaciones de productos agroalimentarios a EEUU ascienden a 160 millones de euros, aunque el total de lo que exporta en este ámbito la región suma 3.658 millones, lo que significa que “tenemos potencial para vender nuestros productos al resto del mundo, algo en lo que tenemos que seguir trabajando, algo por lo que apostamos y algo que, sin duda, a través del IPEX podremos seguir realizando para que no pierdan competitividad nuestras explotaciones”.