La Comunidad de Labradores y Ganaderos de Almendralejo (CLYGAL) pide la dimisión del ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, por “mentir” a los agricultores respecto a la Ley 1/2025, de 1 de abril, de prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentario, que contempla las ayudas para paliar las consecuencias del incremento de los precios de los insumos y de la sequía en los cultivos de vid y olivar de secano, principalmente.
El citado texto legal, en su disposición adicional cuarta sobre la instrumentación de las ayudas recoge que el Gobierno establecerá en un plazo máximo de dos meses una ayuda excepcional a las explotaciones de olivar y viñedo, como compensación por la disminución de los ingresos de los productores por el incremento del precio de los insumos a causa de la invasión de Ucrania, y por la disminución de la cosecha por el impacto de la sequía.
El cuarto apartado de la disposición dice que “la ayuda se instrumentará mediante un procedimiento de concesión directa, que asegure la rápida recepción de la misma por parte de los agricultores”.
Las ayudas siguen sin llegar
Desde CLYGAL recuerdan que han transcurrido cerca de seis meses desde la publicación de la Ley y las ayudas siguen sin llegar, por eso la Comunidad de Labradores se pregunta si el Gobierno va a cumplir la Ley o sólo se trata de “un bulo más de Moncloa”, publicado en el Boletín Oficial del Estado.
La organización agraria destaca que el montante total que recoge la Ley ascendería a 370 millones, de los que 85 se destinarían a explotaciones de viñedo y los otros 285 a olivares, unas partidas de vital importancia para muchos agricultores.
La CLYGAL concluye que, con la caída de la cosecha de uva, a causa de las elevadas temperaturas que hemos soportado este verano, y ante las malas expectativas que se presentan en lo referente a la aceituna, con una campaña de verdeo que arranca casi para cerrar por la falta de calibre comercial, muchos agricultores no podrán aguantar más sus explotaciones.