Unión de Uniones recuerda que ya ha entrado en vigor el nuevo Reglamento que establece normas para autorizar a los Estados Miembros a controlar totalmente mediante satélites y otras tecnologías el cumplimiento de las condiciones de la PAC
En el marco de lo que la Comisión Europea entiende como simplificación y modernización de la la Política Agrícola Común (PAC) de la UE, el Ejecutivo comunitario ha hecho público la adopción de nuevas reglas que permitirán por primera vez a los Estados miembros usar una amplia gama de tecnologías modernas para realizar los controles de superficie ligados a las ayudas de la PAC.
Esto incluye la posibilidad de reemplazar completamente las verificaciones físicas en las explotaciones con un sistema de verificaciones automáticas basado en el análisis de los datos de observación de la Tierra mediante satélites.
Unión de Uniones de Castilla-La Mancha espera que el nuevo sistema se aplique con racionalidad y también una cierta flexibilidad, porque este tipo de vigilancia conlleva márgenes de error (y lo que pasa cada año con el SIGPAC lo demuestra) que pueden suponer más papeleo a los agricultores y ganaderos para demostrar que sobre el terreno las cosas se están haciendo bien, aunque el satélite diga otra cosa.
El nuevo Reglamento 2018/746, publicado el pasado 22 de mayo, permitirá que los datos de los satélites Copernicus Sentinel de la UE y otros datos de observación de la Tierra se utilicen como prueba para comprobar que los agricultores cumplen los requisitos de la PAC para poder cobrar los pagos por superficie (ya sean ayudas directas o de desarrollo rural), así como el cumplimiento de requisitos de la condicionalidad de la PAC, como la quema de rastrojos. De hecho, ya hay experiencias piloto en el uso del Sentinel 2. Sin ir más lejos, la Junta de Andalucía lo ha empezado a utilizar a modo de ensayo en esta campaña con el resultado de que está cursando cartas a los agricultores informándoles que ha detectado mediante este sistema indicios de quema de rastrojos y avisándoles de las consecuencias por incumplimiento de la condicionalidad.
Además de las imágenes del Sentinel 2, también serán aceptables por primera vez otras formas nuevas de evidencia, como fotos con geoetiquetas o información de drones; así como otra documentación relevante que pueda ser obtenida de los agricultores, como etiquetas de semillas, por ejemplo. La Comisión persigue un nuevo enfoque de monitoreo de los incumplimientos, reduciendo el número de controles en las explotaciones, que solo se realizarán cuando la evidencia digital no sea suficiente para verificar el cumplimiento.
Dice el Comisario de Agricultura, Phil Hogan, que la tecnología satelital reducirá las inspecciones en campo y el estrés de los agricultores, al tiempo que reduce los costes de los controles para la administración. Unión de Uniones traduce esto como “los vamos a inspeccionar más y mejor y no se van ni a enterar”.
En todo caso, los controles ya que hacen, porque conforme a las normas actuales de la PAC, los estados miembros de la UE deben realizar una serie de comprobaciones en las explotaciones como parte del Sistema Integrado de Gestión y Control, que garantiza que los pagos a los agricultores de las ayudas PAC se realicen correctamente. Las nuevas reglas permitirán a los estados miembros que deseen hacerlo, reemplazar o complementar los controles sobre el terreno que ahora realizan con controles automáticos y menos costosos.
Cómo funciona
El nuevo enfoque de monitoreo propuesto utiliza los datos de observación de la Tierra extrapolados de los satélites Copernicus Sentinel y los combina con otras tecnologías de observación satelital o la complementa con fotos geoetiquetadas. Esto se procesa automáticamente utilizando algoritmos informáticos que pueden determinar, por ejemplo, el uso de la tierra o la cobertura de las áreas agrícolas observadas.
Esta información se compara y combina con la información existente en el SIGPAC y se realiza una referencia cruzada con cada solicitud individual de ayuda para evaluar si el pago puede hacerse. En los casos en que este sistema automatizado no puede determinar si las solicitudes son correctas, se pueden utilizar otras evidencias (incluidas fotos geoetiquetadas u otra documentación relevante presentada por el agricultor) o bien, llegado el caso, acabar en inspecciones físicas en el campo.
Aplicarlo, sí o no; a todas las ayudas, o sólo a algunas
Los países tendrán la libertad de elegir si aplicar o no el nuevo enfoque de monitoreo. También tendrán flexibilidad sobre si implantarlo en regímenes de ayuda específicos, como el pago básico de pagos directos a los agricultores, o las medidas de apoyo al desarrollo rural, o a ambos. De la misma manera, pueden optar por ampliar gradualmente el área cubierta por el monitoreo dentro de los primeros dos años de su implementación.
Para la Comisión todo son ventajas. Por una parte, las administraciones nacionales pueden integrar mejor sus comunicaciones con los agricultores y soportarán una carga administrativa más reducida y menos costosa como resultado de hacer menos controles sobre el terreno.
Por su parte, el órgano comunitario opina que también habrá beneficios significativos para los agricultores. Por ejemplo, ahora será posible informar a los agricultores que necesitan llevar a cabo ciertas actividades (porque el satélite puede detectar que no las han realizado), lo que facilitará que se puedan cumplir con sus obligaciones ambientales o de otro tipo a su debido plazo y así evitar sanciones por incumplimiento de las normas de la PAC.
No obstante, en Unión de Uniones de Castilla-La Mancha, teniendo en cuenta los muchos problemas e incidencias que tenemos que resolver cada año por discrepancias con el SIGPAC (sin que sea responsabilidad nuestra), nos parece que, por desgracia, este nuevo sistema no va a ser tan sencillo de aplicar, ni tan preciso en sus resultados, como le parece a la Comisión y pediremos que su introducción, si es que el Ministerio se plantea el hacerla, haga uso de las opciones que tiene y lo haga de una forma progresiva, ensayando primero sus resultados, antes de aplicarla al conjunto de las superficies y las ayudas.
