Unión de Uniones se hace eco del estudio publicado en la Revista Environmental Health, extrayendo como principal conclusión que, como ya se informó desde la organización hace unas semanas en relación a Sudáfrica, también en la agricultura de Estados Unidos se usan decenas de pesticidas (72 cita el informe) cuya utilización está prohibida en la UE por considerarlas peligrosas contra las personas o el medio ambiente. Ello no quiere decir necesariamente que estas sustancias entren en la UE a través de las importaciones de productos USA, o que lo hagan en cantidades que supongan riesgos, pero en todo caso, sí que sitúa a las producciones europeas en una situación de “competencia desigual” frente a dichas importaciones y refuerza los argumentos a favor de la protección en frontera del modelo agrícola europeo.
El estudio “The USA lags behind other agricultural nations in banning harmful pesticides”, firmado por N. Donley, del Center for Biological Diversity de Portland (Oregon, USA) ha analizado la tendencia de las cuatro mayores potencias agrícolas respecto al uso de fitosanitarios: Estados Unidos, Unión Europea, Brasil y China, que en conjunto suman más de la mitad del valor de la producción agrícola mundial. Además, estas potencias son los mayores productores y consumidores de pesticidas.
Cada uno de ellos presenta distintas regulaciones de pesticidas; de esta forma, la Unión Europea es la que presenta una de las regulaciones de pesticidas más extensa y protectora en la que la Comisión Europea prohíbe la aprobación y uso de aquellos pesticidas que presentan algún efecto dañino en la salud humana o animal o efectos inaceptables en el medio ambiente, debiendo demostrar la industria que su producto puede ser usado de forma que no presente daños a humanos, a la biodiversidad o el medio ambiente.
En Estados Unidos, la regulación es en su mayor parte revisada por la United States Environmental Protection Agency (EPA). En cuanto a la exposición de los humanos, las tolerancias de residuos se sitúan en valores tales que no provoquen ningún daño. Sin embargo, este no es el caso de eventuales efectos sobre plantas, animales, medio ambiente o daños a humanos por exposiciones ocupacionales (exposición de los trabajadores a esos productos), donde la evaluación de los daños se valoran únicamente como un análisis de coste-beneficio.
En China la modesta regulación de pesticidas ha experimentado actualizaciones tales como requerimientos de licencia para vendedores, conservación de registros para los usuarios y comités de evaluación de la seguridad de pesticidas. Además, ha prohibido 50 pesticidas y restringido otros 30 desde 2014.
En cuanto a Brasil su regulación de pesticidas está afectada por tres agencias de regulación, con opción a incrementar más la protección respecto a determinados pesticidas mediante medidas tales como limitar la dosis en función del cultivo o exigir equipos de protección para los aplicadores. entre otras posibles regulaciones.
El estudio recopiló una lista de 500 materias activas de los pesticidas que fueron utilizadas en EEUU, Unión Europea, Brasil y China; además de su estatus en cada país (aprobado, no aprobado, prohibido o en proceso de eliminación gradual).
Datos de uso y tendencias de pesticidas en EEUU
Desde 1970 se han utilizado 500 materias activas de pesticidas en EEUU, si lo comparamos con la UE, Brasil y China, se expone en el informe que hay 72, 17 y 11 pesticidas prohibidos o en proceso de prohibición respectivamente en cada uno de estos territorios.
Además, de entre los pesticidas que están en proceso de aprobación en EEUU, hay 85 prohibidos en la UE, Brasil y China, más otros 2 prohibidos en la UE, aunque no en los otros dos países..
Puestos estos datos en términos de volumen, de los 544 millones de kg. de pesticidas utilizados en 2016 en EEUU, el 27% estaban prohibidos en la Unión Europea; aunque sólo un 1,2% estaba prohibido tanto en la Unión Europea, China y Brasil, lo que da una idea de que el nivel de exigencia europeo es muchísimo más elevado también en la UE que en China y que en Brasil, no solo con respecto a Estados Unidos.
Entre las materias activas usadas en EEUU y prohibidas en la UE se encuentra el dicrotophos, cuya utilización ha venido aumentado desde 1992, pesar de estar catalogado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como alta o extremadamente peligroso.
También se encuentra varios pesticidas que tienen organofosforados como materia activa, considerados como neurotóxicos.
Según el informe, el principal método que utiliza la EPA para cancelar el uso de un determinado pesticida es la retirada voluntaria por parte de la empresa propietaria; aunque también se debe requerimientos legales, a que llega a fin su patente o por negociaciones de la empresa con la EPA para no prohibir drásticamente el producto.
Algunos Estados de EEUU han declarado que las regulaciones de la EPA no son lo suficientemente protectoras.
Mientras que la Unión Europea, China o Brasil avanzan hacia una prohibición de determinadas materias activas para su uso como pesticidas, (aunque el cambio político en Brasil podría cambiar su tendencia), EEUU mantiene estos mismos productos y en algunos casos incluso aumenta su uso a pesar de su peligrosidad, siendo la cancelación voluntaria prácticamente su única forma de eliminar su uso, frente a la estrategia de prohibición total que se utiliza en otros países.
Unión de Uniones considera que estos datos refuerzan la necesidad de imponer el principio de reciprocidad en las relaciones comerciales de la UE con sus principales competidores en los mercados agroalimentarios internacionales, exigiendo que todo producto que entre en el mercado interior europeo cumpla idéntico nivel de exigencias en materia de seguridad alimentaria y sostenibilidad ambiental que se requiere a las producciones comunitarias.
