Convocados por Unión de Uniones de Castilla-La Mancha, treinta tractores y más de 200 coches se han manifestado este martes por las calles de Toledo, para pedir que se habiliten ayudas que palíen los daños causados por la borrasca ‘Filomena’, principalmente en el olivar, así como medidas que permitan atajar la sobreabundancia de conejos y que se declare como plaga.
En el acto han participado agricultores y cooperativistas de las provincias de Toledo, Cuenca y Ciudad Real, que han recorrido las calles con sus vehículos, en los que habían colocado carteles con lemas en los que resumían sus reivindicaciones.
Los manifestantes han reclamar una intervención de las administraciones en apoyo a los damnificados, con ayudas directas para el olivar de Castilla-La Mancha para la recuperación de las plantaciones dañadas o destruidas por la nieve y posteriores heladas del temporal ‘Filomena’.
Además, piden un plan para las cooperativas y almazaras para asegurar el mantenimiento de la mano de obra, inversiones y gastos frente a la caída de la producción de los años venideros por los daños en el olivar y evitar así su pérdida de viabilidad y, consecuentemente, de renta de los socios.
Respecto a los conejos, demandan un plan para su control, ya que están asolando los campos de cultivo.
También reclaman un seguro agrario accesible y que responda a las catástrofes.
Durante la manifestación, el presidente de Unión de Uniones de Castilla-La Mancha, Andrés García Vaquero, ha indicado que el temporal arrasó unas 10.000 hectáreas de olivar, aunque “no se conocerá la verdadera magnitud de los daños hasta mayo, cuando se produzca la brotación y comience a subir la savia”.
