El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha criticado duramente este miércoles a las confederaciones hidrográficas de la región, denunciando los retrasos administrativos y el trabajo de algunos funcionarios y responsables de estos organismos de cuenca.
Ha indicado que estos retrasos “eternos” en la burocracia de algunas confederaciones se traducen luego en pagos injustificados a las personas. Ha señalado rotundamente “que no lo va a permitir y va a jugar muy duro”.
Ha afirmado que “a lo mejor hay algún funcionario que ha estado años callado, y ahora está sacando expedientes, casualmente, o que a lo mejor hay otros funcionarios y otros responsables que miran para otro lado después de tardar cinco, seis y siete años en contestar a una solicitud es negligencia pura y dura”.
García-Page ha anunciado que, en ese sentido, trasladará al Gobierno de España “algunas quejas” en relación a “la gestión de algunos regadíos y algunos pozos y con los retrasos eternos de la burocracia de algunas confederaciones hidrográficas”. Al respecto, ha advertido que no admitirá la “negligencia pura y dura” derivada de estas situaciones.
