El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) acaba de actualizar los datos de la superficie española de cultivos, en los que se constata una apuesta de los productores por ampliar las hectáreas de frutos secos, naranja y aguacate y de recortar las de viñedo, melocotón, mandarina y caqui.
El campo español está en permanente cambio, y así lo demuestra la comparativa ministerial de las «Superficies y producciones anuales de cultivo» de 2021 y 2020, una estadística que el MAPA transmite a la Comisión Europea de forma periódica.
Aunque los de 2021 aún son un avance de datos y los de 2020 todavía son provisionales, sugieren importantes cambios en los intereses de los productores, sobre todo en la producción de fruta de hueso.
La superficie total de melocotoneros, que incluye al melocotón y la nectarina, ha bajado en 11.103 hectáreas durante el pasado año y ahora es de 60.955 hectáreas.
La superficie de melocotoneros a final de 2021 se situaba en 32.980 hectáreas (11.365 ha menos respecto a 2020), mientras que la de nectarinas era de 27.975 (+265 ha).
También ha retrocedido la de ciruelos hasta las 13.685 hectáreas (-721) y la de albaricoqueros, que se ha fijado en 19.435 ha (-348), por lo que el único repunte en fruta de hueso lo ostentó el sector de la cereza y el guindo (29.608 ha, +1.697).
La actividad citrícola tiende claramente a elevar la producción de naranja dulce (142.871 ha, +2.085), limón (50.412 ha, +2.216) y pomelo (2.831 ha, +203) y a disminuir la de mandarina (102.384 ha, -2.112), sobre todo la de la categoría de clementinas (58.029 ha, -2.063).
La fruta de pepita se mantuvo estable con ligeras disminuciones de superficie tanto en peral (20.015 ha, -206) como en manzano (29.451 ha, -39) y una leve alza en níspero (2.285 ha, +28).
En el resto de los frutales, uno de los mayores crecimientos lo ha protagonizado el aguacate, que ya ocupa 18.061 hectáreas, 2.212 más que en 2020, en contraste con el caqui, que cerrado el pasado ejercicio con una superficie de 17.144 hectáreas, 1.268 menos que un año antes.
En frutos rojos, se produce un aumento de la extensión dedicada al arándano (4.565 ha, +360) y una disminución de la de frambueso (2.419 ha, -246).
El almendro y el pistacho ganan terreno
Todos los frutos secos ganan mucho terreno en España en un año, sobre todo el almendro (744.466 ha, +25.926) y el pistacho (61.231 ha, +11.697), pero también el nogal (12.781 ha, +491), el castaño (38.231 ha, +452) y el avellano (13.067 ha, +43).
En cuanto al leñoso más importante de España, el olivar, la superficie se mantiene apenas sin cambios, con 2.623.289 hectáreas, 432 menos que en 2020, pero, eso sí, con un trasvase de los árboles destinados a aceituna de mesa (154.825 ha, -16.327) hacia los dedicados a aceite de almazara (2.468.464 ha, +15.895).
El otro gran leñoso de la agricultura española, el viñedo para vinificación, también registró una tendencia a la baja en el último año (912.433 ha, -2.577), mientras que el viñedo dedicado a uva de mesa creció ligeramente, hasta situarse en 15.249 hectáreas (+329). EFEAGRO
