«Si no es por la intervención de los agricultores, se quema el monte entero», ha asegurado este miércoles a Efe Pedro Alesanco, uno de los veinte tractoristas que colaboró en la noche del martes en las labores para evitar la propagación del fuego en la localidad riojana Badarán.
Para este agricultor de 54 años, «el fuego fue claramente intencionado» porque el primer fuego «se originó en una cava muy aislada, donde no había maquinaria trabajando».
«Sientes mucho miedo cuando ves el fuego porque, debido al viento, avanzaba con mucha rapidez. Quien (presuntamente) prendió el fuego sabía lo que hacía, ya que se vieron seis focos en 10 minutos. Hoy mi sentimiento es de pena y mucha rabia», ha lamentado.
Cuatro incendios
A última hora del martes se registraron en La Rioja, de forma simultánea, cuatro incendios que afectaron a zonas de cereal, uno de ellos en Logroño, que ya está controlado, y media hora después, hacia las 20:00 horas, tres en La Rioja Alta, en las zonas de Badarán, Santo Domingo de la Calzada y Torrecilla sobre Alesanco, que se encuentran controlados.
Este labrador de Badarán estaba ayer cosechando una finca de trigo situada en lo alto de un montículo, por lo que enseguida vio el fuego, que se detectó sobre las 20:00 horas.
Rápidamente alertaron a agricultores de los pueblos cercanos, como Villaverde y Estollo, quienes acudieron con sus tractores hasta juntarse una veintena de vehículos agrícolas.
Prohibición de cosechar
La mayoría de las fincas de cereal de la zona ya estaban cosechadas, pero en algunas quedaban restos de paja sin empacar porque, el pasado 11 de julio, el Gobierno de La Rioja prohibió realizar tareas agrícolas con maquinaria con temperaturas superiores a 35 grados y recomendó no efectuar estos trabajos entre las 12:00 y las 20:00 horas.
Debido a la sequedad del terreno por las altas temperaturas, Alesanco lleva este verano en su tractor una cuba con 6.500 litros de agua, «por si acaso».
Con el «chisel», el brazo de púas colocado en la parte delantera del tractor, durante el fuego, los tractoristas fueron labrando alrededor de las fincas para retirar la paja y después fueron refrescando con agua para evitar la propagación de las llamas, ha explicado.
«Si no llega a ser por los agricultores y sus tractores, el fuego llega hasta el Monasterio de Valvanera», situado a 30 kilómetros de Badarán, ha subrayado.
A pesar de la intervención de los agricultores con sus tractores, ayer se quemó en Badarán una parcela de trigo aún sin cosechar y otra finca con fardos de paja, pero Alesanco no sufrió ninguna pérdida en sus cultivos.
Ha agradecido a sus vecinos de Badarán y a los compañeros de los pueblos cercanos su rápida colaboración y también ha ironizado con que «no acudieron ni ecologistas ni políticos a apagar los fuegos».
Este agricultor ha opinado que los incendios forestales se originan porque «el monte está sucio, no es que no se limpie, es que no se deja limpiar».
Así, ha recordado que, hace años, «no había fuegos porque los pastores cuidaban de sus montes, era de donde comían, se encargaban de quemar pequeños ribazos y dejaban todo limpio».
El alcalde de Badarán, Francisco Javier Ibáñez, ha relatado este miércoles a Efe que recibió, cuando se inició el incendio, el aviso del SOS 112 para que movilizasen a los agricultores de la zona hasta que llegasen los retenes forestales para evitar la propagación del fuego debido a la cercanía de varios focos en la misma zona, también en Torrecilla sobre Alensanco y Cirueña.
«El objetivo era evitar que se extendiese el fuego por el barranco de Valmayor, pero, debido al viento tremendo que soplaba, las llamas se extendieron de forma increíble y había que cortarlas para que no subiera el fuego hacia el monte», ha indicado.
A pesar del trabajo de los tractores, según Ibáñez, el fuego llegó casi hasta la carretera que une Estollo y Villaverde.
Por ello, ha ensalzado la colaboración de los agricultores de los pueblos de la zona, algunos de los cuales acudieron antes de que el Ayuntamiento los movilizase.
«En estos casos, hay que actuar rápido, sobre todo después de ver estos días las imágenes de televisión de los incendios forestales que llegan hasta los pueblos», ha reflexionado.
El alcalde de Badarán ha reconocido que no tiene datos sobre el origen de los fuegos, «pero da qué pensar que hayan sido tantos y a la vez». Rebeca Palacios. EFEAGRO.
