El presidente de ASAJA nacional y de Ciudad Real, Pedro Barato, se ha referido este martes a la decisión del Gobierno de Castilla-La Mancha de inmovilizar el ganado ovino y caprino de cuatro provincias de la región (Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo), como medida de contención frente a los focos de viruela ovina y caprina.
En este punto, Barato ha sido contundente al señalar que “el ganadero no es culpable, está siendo una víctima de una enfermedad que es muy complicada y que puede acarrear unos condicionantes de futuro muy graves para nuestro sector ganadero”.
En este sentido, el presidente nacional de la organización agraria ha pedido “celeridad” en la puesta en marcha de medidas económicas y sanitarias.
Se ha mostrado convencido de que “las medidas no hace falta estudiarlas, sino tomarlas”. “Pensemos ya en la reposición, en la prevención y ver hasta donde se puede llegar en la vacunación para que esto no tenga consecuencias en los mercados exteriores”, ha dicho.
Ha salido en defensa de un sector ganadero que “ha hecho importantes inversiones y que cuando parecía que la situación se ponía un poco a su favor, llega este batacazo”.
Barato ha asegurado que “las administraciones tienen que tener la capacidad de poner en marcha medidas urgentes frente a la angustia del ganadero, porque esto no puede esperar”.
Ha dicho que “los mejores baremos económicos que se pueden usar son los que marca el propio mercado”, haciendo referencia a lo que se paga por una oveja.
El presidente de ASAJA ha terminado pidiendo mucha comprensión a la sociedad ante la situación que están atravesando los ganaderos.
