El cultivo del olivo presenta actualmente, a nivel autonómico, un estado fenológico dominante generalizado en todas las provincias: «G2» (Fruto cuajado), a excepción de Granada, donde aún predominan los estados «F» (Floración) y «G1» (Caída de pétalos), según explican desde la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIF).
La previsión meteorológica para los próximos días indica una situación de estabilidad atmosférica, acompañada de un aumento de las temperaturas, lo que acelerará la evolución fenológica del cultivo.
Por provincias
En relación con la incidencia de la generación carpófaga de la polilla del olivo (Prays oleae) es elevada en la mayoría de las provincias.
Según los valores registrados, destacan Málaga, Sevilla y Córdoba, con medias provinciales del 44,1%, 41% y 35,8% de aceitunas con presencia de Prays vivo, respectivamente.
Por el contrario, Cádiz, Huelva y Granada presentan la menor incidencia, con valores medios del 4,8%, 7% y 1%, respectivamente.
Además, la presencia de huevos eclosionados es alta, destacando las provincias de Sevilla, Málaga y Jaén con valores de 31.70, 29.70 y 24.30%, respectivamente.
Las condiciones ambientales condicionan claramente la supervivencia y actividad de este agente, altas temperaturas y baja humedad limitan la viabilidad de las puestas y por el contrario si son suaves favorecen su desarrollo, penetrando la larva en el fruto.

























