La Asociación Ojos del Guadiana Vivos ha mostrado en un comunicado su oposición al borrador del Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) que esta semana se aprobó el Patronato del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel.
Desde esta organización han señalado que su aprobación supone ir «en dirección opuesta a lo que marca la Directiva Marco del Agua», que pretende mejorar el estado ecológico de las masas de agua europeas y para ello fija una serie de indicadores que evalúen su buen o mal estado.
El borrador del PRUG contempla la construcción de varias presas en el entorno del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel que impedirían la continuidad del río Guadiana, una circunstancia que la Directiva Marco del Agua considera determinante para garantizar su buen estado ecológico.
La construcción de barreras en los cauces fluviales, ha detallado esta asociación, perjudican la continuidad de las aguas de los ríos, algo que ya ocurre en las Tablas de Daimiel, donde existen dos presas, la del Morenillo y la del Cerro de Entrambasaguas que dificultan la continuidad del río Guadiana.
La presencia de estas dos presas, han dicho, podría ser la causa de las altas densidades de carpas que registra el parque nacional o de la modificación de la calidad del agua que se está produciendo en el humedal.
Lejos de revertir esta situación, han indicado, el PRUG que se pretende aprobar incluye dos elementos de retención más que se unirían a estas presas, uno en el arroyo de Casablanca y otro en el antiguo Molino de Griñón.
La Asociación Ojos del Guadiana Vivos se opone a nuevas barreras ya que, en su opinión, «empeorarían el estado ecológico» del río Guadiana.
Además, rechazan la justificación de estos y otros proyectos de presa con la excusa de evitar la llegada de vertidos contaminantes desde los pueblos del entorno al Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel.
Por el contrario, la organización apuesta por invertir en la mejora de la depuración de las aguas residuales de los pueblos del entorno del parque y por recuperar el buen estado ecológico del Alto Guadiana.
Así mismo, Ojos del Guadiaana Vivos se opone al borrador del PRUG al señalar que también incluye la posibilidad de realizar trasvases de agua desde el Tajo-Segura.
En su opinión, esta medida, junto con la de la construcción de nuevas retenciones, supone prorrogar el Plan de Regeneración Hídrica aprobado en la década de 1980 para combatir la desecación del humedal y que resultó un «absoluto fracaso».
Este plan, han señalado, quedó en evidencia con los incendios de 1986 y 2009, porque «lo fió todo a aumentar la garantía de inundación del parque con la ejecución de infraestructuras de retención y a una política de trasvases ineficiente».
Para esta asociación, lo que es urgente que desde la gestión del parque «se cambie de estrategia», apostando por una estrategia orientada a «alcanzar los objetivos marcados por la Directiva Marco del Agua».
Del PRUG, han dicho, solo resulta aceptable la resolución sobre la zonificación y los usos compatibles en el ámbito del parque nacional.
Finalmente, han señalado que se debe seguir trabajando en un PRUG que se marque como reto en los diez años de su vigencia a cumplir con los objetivos ambientales consolidados que demandan las distintas directivas europeas de Aves, Hábitat y Agua.