El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo ha destacado este miércoles,, la evolución positiva del sector agrario de Castilla-La Mancha, tras año y medio de avance gracias a las nuevas políticas de estímulo de la agricultura y la industria agroalimentaria.
Martínez Arroyo, que ha participado en la Mesa ‘Nuevo modelo de economía para el empleo’ junto con la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, ha destacado la convocatoria de ayudas públicas para el Fomento de la Calidad Agroalimentaria, conocidas como FOCAL, dotada con 50 millones de euros, que ha conseguido movilizar una inversión de la industria regional de 261.563.455 euros. Martínez Arroyo ha confirmado que ya se ha enviado a los interesados las resoluciones favorables para que puedan empezar las inversiones en 223 proyectos que generarán puestos de trabajo y activarán la economía en el medio rural, pues “son empresas que no se deslocalizan”.
En este sentido, la segunda convocatoria prevista por la Consejería de Agricultura –cuya aprobación será inminente- está dotada con 70 millones de euros e incluirá también al sector del vino. Martínez Arroyo ha recordado que gracias al Decreto aprobado por el Consejo de Gobierno el 19 de diciembre de 2016 “obtendrán preferencia las Entidades Asociativas Prioritarias”, que son aquellas que alcancen un determinado volumen de facturación. La Consejería ha adoptado esta decisión para fomentar las integraciones comerciales de las cooperativas, al considerar que éstas necesitan ganar tamaño para poder competir mejor en los mercados. Un mensaje que ya ha calado, fundamentalmente, en el sector del vino, siendo las cooperativas de Ontur y Albatana, en Albacete, “las primeras que han decidido unir fuerzas para comercializar juntos su vino” de la Denominación de Origen Jumilla; seguidas de las también albaceteñas cooperativas de Cenizate y Fuentealbilla, de la Denominación de Origen Manchuela. Además, el próximo 10 de febrero, el consejero de Agricultura asistirá a la firma de otra importante integración comercial entre la cooperativa de ‘El Progreso’, de Villarrubia de los Ojos y ‘Los Pozos, de Daimiel, en la provincia de Ciudad Real.
Otra de las áreas por las que apuesta Martínez Arroyo tiene que ver con el fomento del Desarrollo Rural y ha recordado que el 16 de agosto pasado se resolvió la convocatoria de selección de los Grupos. En total, son 29 las Estrategias seleccionadas, correspondientes a los 29 Grupos de Desarrollo Rural, que cubren más del 90 por ciento del territorio de Castilla-La Mancha.
La ficha financiera en el Programa de Desarrollo Rural asciende a unos 133,4 millones de euros, de los que 88,4 millones de euros se han repartido en una primera asignación; garantizando, en primer lugar, un mínimo de 1,8 millones de euros por Grupo, más 295.000 euros para gastos de funcionamiento. Para ello, la Consejería ha repartido el resto, 26,4 millones de euros, en función de la ejecución alcanzada en el periodo 2007-2013, lo que supone el reparto del 20 por ciento; la calidad de la Estrategia, según unos criterios de puntuación, otro 20 por ciento; las incidencias ocurridas durante el periodo 2007-2013, un 10 por ciento; y, como elemento más relevante, el repartido en función de las características del territorio, que supone el 50 por ciento restante. Para este último criterio, la Consejería ha utilizado el índice de ruralidad, la densidad de población, la tasa de dependencia, la estructura de población, el desempleo, el área en zonas desfavorecidas y la superficie Red Natura.
Además, a lo largo de 2017, en función del grado de ejecución de cada uno de los grupos, está previsto destinar unos 6 millones de euros para completar las Estrategias en Grupos en zonas con dificultades, esto es, con alto grado de despoblamiento o con afectación por áreas de Parques Nacionales. Finalmente, la última asignación, de 39 millones de euros, se producirá en 2019. Un asunto prioritario para el Gobierno regional que trata de poner en marcha los proyectos de los emprendedores del medio rural, evitar el despoblamiento y garantizar la sostenibilidad de nuestro medio ambiente.
El titular de Agricultura ha mencionado que si algo distingue a la región es su paisaje vitícola que actúa como “locomotora económica”. Por esta razón, en materia de agricultura y antes de terminar el año, el Gobierno regional ha efectuado una inyección económica en el medio rural de Castilla-La Mancha para 1.368 viticultores que habían solicitado la ayuda por reestructuración de viñedo, un área que permite la creación de puestos de trabajo de forma directa en la viña y también dinamiza la economía en la compra de alambres, maquinaria o plantas.
Medio Ambiente, una oportunidad
Asimismo, Martínez Arroyo ha puesto de manifiesto la importancia de la forestación de tierras agrícolas, los tratamientos selvícolas y la ampliación de contratos de los trabajadores de GEACAM de nueve a doce meses, políticas fundamentales impulsadas desde la Consejería que permiten la generación de empleo en el medio rural.
Por último, el consejero ha hecho hincapié en la necesidad de hacer sostenible la actividad económica en el medio rural, en tanto en cuanto, “la preservación del medio ambiente en Castilla-La Mancha supone hoy una oportunidad”. Esta nueva perspectiva permite al Gobierno regional acceder a fondos europeos para financiar a las empresas que invierten en medio ambiente y, para demostrarlo, ha puesto como ejemplo el proyecto subvencionado por LIFE, que es el instrumento financiero europeo para planes relacionados con la acción por el clima y la conservación de la naturaleza “que ha consistido en la restauración de albardinares y estepas salinas en los Humedales de La Mancha y que permite la comercialización diferenciada de productos agrarios extensivos de alta calidad”. A través de un sello en su producción, “los agricultores pueden optar a más ayudas puesto que están manteniendo el entorno de su cultivo y la biodiversidad en Europa”.
