Representantes de la Asociación Provincial de Agricultores y Ganaderos de Guadalajara (APAG) se han reunido con el presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo(CHT), Juan Carlos de Cea, y el comisario de aguas para tratar los problemas de agua y de regadíos que sufre la provincia .
El secretario general de APAG, Antonio Torres, y varios miembros de la Junta Directiva expusieron la situación de los regadíos en la provincia, con restricciones en los riegos a causa de la escasez de agua en los pantanos y pusieron de manifiesto la necesidad de la conexión Beleña-Alcorlo, como solución para los problemas de agua, tanto en el regadío como en el abastecimiento humano y a la industria.
Ante esta reivindicación, el presidente de la CHT manifestó que desde su departamento se ha elaborado un informe sobre dicho proyecto, que ha sido entregado a la ministra de Agricultura. En este informe se deja constancia de que la obra de conexión de los ríos Sorbe y Bornova no podrá realizarse mientras no se cambie la Ley de Declaración del Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara, por parte de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Ante esta situación APAG, que lleva años solicitando la conexión, pedirá reunión a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha para tratar de desbloquear el proyecton y que se acomenta dicha infraestructuras.
En la reunión se trató también el tema de las concesiones particulares y su adaptación a la normativa de contadores, así como la posible exención del canon de riego a los agricultores con restricciones en los riegos.
En este sentido el presidente de la Confederación argumentó que sólo habrá exenciones en los casos en los que la restricción en la concesión sea superior al 50%.
La provincia de Guadalajara cuenca con 12.862 hectáreas de Superficie Agraria Util (SAU) en regadío, una cifra que apenas representa el 4% de las tierras labradas y un porcentaje muy bajo frente al casi 12% de la región. La poca población que se fija en estos pueblos es por el regadío, por lo que desde APAG seguiremos defendiendo los intereses de los regantes, que van a ver reducido su agua y limitada la rentabilidad de sus explotaciones con estas restricciones.
