La Asociación Nacional de Criadores de Ganado Merino, en calidad de entidad Oficialmente reconocida por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) para la gestión de la raza Merino, ha denunciado la existencia de “conductas que podrían atentar no solamente contra los intereses de la raza Merina y la Asociación, sino también de los consumidores y usuarios”.
La razón es que se utiliza la denominación de la raza Merina por parte de ganaderos que ni tienen relación alguna con la asociación ni cuentan con animales inscritos en el Libro Genealógico de la raza. “El equipo técnico-administrativo de la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Merino ha comprobado que los animales ofertados bajo la denominación de ‘Ganado de Raza Merina’, no se encuentran incluidos en el Libro Genealógico ni, cuanto menos, son propiedad de algún ganadero que, siendo miembro de la asociación, hubiera desatendido su obligación de incluir a los animales de su propiedad en el citado Libro”, señalan desde la asociación.
“Nos encontramos ante una fraudulenta y malintencionada utilización de la denominación de la raza Merina con fines absolutamente espurios, como es el de atribuir a los animales unas características que no se acreditan, todo ello con el objetivo de alcanzar un beneficio por parte de sus propietarios aprovechándose de la reputación del ganado ovino de raza Merina, con el consiguiente aprovechamiento económico que ello supone en detrimento de los derechos que vienen reconocidos a los consumidores y usuarios”, afirman.
La asociación concluye que ese proceder supone un “evidente atentado” contra los derechos de los consumidores y usuarios, toda vez que pueden verse inducidos al mismo error de considerar que se encuentran ante animales de raza Merina de pureza acreditada, sin que tal presunción sea real con motivo del “falsario” proceder de los anunciantes.
