Tres años, ese el plazo en el que se van a invertir 52 millones de euros provenientes del plan de recuperación económica nacional, para la ejecución de la sustitución de los bombeos del Júcar. Una obra muy esperada y en la que se está trabajando a nivel técnico desde la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural con la Confederación Hidrográfica del Júcar.
El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, así lo ha explicado este miércoles en su visita a la empresa transformadora de productos agrícolas Talfrost, en Albacete, donde ha indicado que hay “muy buena sintonía” entre ambas instituciones.
Se trata, ha reseñado, de un avance acordado con el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y “largamente perseguida por los regantes”, más de 3.000 beneficiarios, y “será una realidad entre este año y 2023”. La sustitución de los bombeos, ha explicado, va a propiciar “más agua y de más calidad para los regantes”.
Martínez Arroyo ha destacado la defensa del agua que se realiza desde la región, en una comunidad donde “este recurso es fundamental para la vida y el desarrollo de la agricultura, ganadería y el sector agroalimentario”.
Así, ha dicho, el agua, es “futuro” y “vamos a defender los intereses de los ciudadanos de Castilla-La Mancha para tener un futuro sostenible”.
