Dentro de las ayudas asociadas a la producción para la próxima Política Agraria Común (PAC), el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha propuesto una línea para la producción de proteínas de origen vegetal (plan proteico).
Los objetivos pasan por mejorar la orientación al mercado y aumentar la competitividad; la productividad y sostenibilidad; fomentar el uso de recursos propios para la alimentación animal y el apoyo a sectores en dificultades.
En el borrador del ministerio recogen que la superficie de estos cultivos se ha ido reduciendo, puesto que se hallan sujetos a una fuerte competencia internacional que lastra su competitividad. Se trata, por tanto, de sectores con gran dependencia exterior, tanto para alimentación humana como animal. En el caso de semillas oleaginosas el 80% de las necesidades nacionales de alimentación animal se cubre con importaciones de terceros. Nuestro reducido grado de autoabastecimiento genera vulnerabilidad al sector ganadero y pone en mayor riesgo nuestra seguridad alimentaria. El análisis, por tanto, ha puesto de relieve la necesidad de fomentar el uso de los recursos disponibles propios para alimentar la cabaña nacional.
Por otra parte, la necesidad de impulso de estos cultivos ha de ir en paralelo al desarrollo de variedades adaptadas y suficientemente productivas que aseguren la rentabilidad del cultivo, por lo que es necesario un apoyo a la producción de semillas.
Condiciones de elegibilidad
Las ayudas irán destinadas a hectáreas admisibles de tierra de cultivo en las que se cultiven leguminosas y oleaginosas.
Cuando sea una práctica habitual de cultivo, se admitirán mezclas de las especies de leguminosas con otros cultivos no incluidos en la misma, siempre que las leguminosas sean el cultivo predominante en la mezcla.
Requisitos
-Emplear semilla de alguna de las variedades recogidas en el Catálogo común de variedades de especies de plantas agrícolas de la Unión Europea, en el Registro español de variedades comerciales, o que tengan concedida una autorización de comercialización.
-Efectuar todas las prácticas y labores agrícolas que aseguren el normal desarrollo agronómico del cultivo y mantenerlo en el terreno hasta alcanzar el estado fenológico que se indica a continuación, para cada tipo de cultivo, salvo causa de fuerza mayor debidamente justificada:
– Leguminosas para grano, incluida la soja: hasta el estado de madurez lechosa del grano.
– Leguminosas para aprovechamiento forrajero anual: hasta el inicio de la floración.
– Leguminosas forrajeras plurianuales: Durante todo el año, excepto en el año de siembra y de levantamiento del cultivo, que se llevarán a cabo conforme a las prácticas tradicionales en la zona.
– Oleaginosas, excepto soja: hasta el cuajado del grano.
Quedarán excluidas del cobro de la ayuda aquellas superficies cuya producción se utilice como abonado en verde, salvo causas de fuerza mayor debidamente justificadas.
En el caso de la alfalfa cultivada en regadío será necesario disponer de un contrato de suministro a una o varias explotaciones ganaderas en el territorio de la UE por la totalidad de la producción, o ser titular de una explotación ganadera (con código REGA), con una carga ganadera acorde a la superficie solicitada.
Beneficiarios
Podrán ser beneficiarios agricultores activos titulares de explotaciones con hectáreas elegibles de tierra de cultivo en las que se cultive alguno de los cultivos proteicos citados. El beneficiario debe ser titular de explotación agraria inscrita en el Registro de Explotaciones Agrarias.
Se trata de un Plan conformado por cuatro tipos de ayudas por superficie, para fomentar los cultivos proteicos y reducir así la dependencia de materias primas esenciales para alimentación animal y humana, fomentando proteínas vegetales cultivadas en la UE, con mayor garantía de sostenibilidad y menor huella ambiental en su transporte, como se detalla:
– Ayuda a la producción de legumbres.
– Ayuda a la producción del resto de leguminosas.
– Ayuda a la producción de oleaginosas.
– Ayuda a la producción de semillas certificadas (leguminosas).
Las ayudas adoptarán la forma de un pago anual por hectárea, con las intensidades de ayuda que figuran a continuación:
