El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha subrayado esta semana en París que la Política Agraria Común (PAC) es un sistema de apoyo a las rentas que proporciona estabilidad a los agricultores y ganaderos, cuya actividad productiva está condicionada por factores incontrolables, como las inclemencias climáticas.
“Si hay una subvención en el mundo bien empleada es el apoyo a los agricultores y ganaderos”, ha enfatizado el ministro, quien ha señalado que la PAC “tiene una razón de ser absolutamente clara” y la va a seguir teniendo en el futuro.
Ha reiterado que la nueva PAC, que se aplicará a partir del 1 de enero de 2023, contiene una mejor distribución de las ayudas y beneficia sobre todo a la agricultura familiar y profesional.
Sobre la nueva PAC, el ministro ha subrayado que contiene una serie de medidas encaminadas a fomentar un sector agrario inteligente, competitivo, resiliente y diversificado, que garantice la seguridad alimentaria. Además, refuerza la protección del medio ambiente y la biodiversidad y está orientada a fortalecer el tejido socioeconómico de las zonas rurales.
Planas ha destacado la apuesta por el relevo generacional y el reforzamiento del protagonismo de la mujer en las actividades agrícolas, ganaderas y en el entramado socioeconómico de las zonas rurales. Jóvenes y mujeres son fuerzas motrices en los procesos de transformación necesarios para consolidar unos sistemas alimentarios sostenibles, ha apuntado.