La plataforma Tierras Apícolas se está consolidando como un proyecto que ayuda a impulsar la polinización con colmenas por todo el país, con la participación, ya, de casi 300 apicultores, propietarios de fincas y agricultores de toda España.
Las importaciones récord de mieles baratas y de mala calidad -principalmente chinas, a través de terceros países-; un etiquetado fraudulento, que no permite conocer la trazabilidad y la procedencia al consumidor final (ni el porcentaje de mieles, ya que suelen ser mezclas); la varroa y otras enfermedades de las abejas, que acarrean pérdidas de hasta un 30% de las colmenas, cada año; la considerable merma de las producciones -hasta un 50%- por la sequía asociada al cambio climático; la pérdida de biodiversidad floral y el uso indiscriminado de agroquímicos; el impacto de especies invasoras; el incremento de costes de producción y los combustibles y la congelación de exportaciones dibujan un panorama “desolador, que está llevando a muchos apicultores a la ruina”, afirman desde Tierras Apícolas.
No es la miel, es la polinización
Si bien el impacto económico del mercado de la miel en España es de algo más de 60 millones de euros, la contribución de la polinización de las colmenas a la agricultura se cuantifica en 2.400 millones de euros anuales, según el informe de Greenpeace “Alimentos bajo amenaza”.
Por tanto, no está en juego sólo la preservación de las abejas y de la miel, sino la propia soberanía alimentaria e innumerables producciones de frutas, hortalizas y frutos secos, que dependen de la polinización de los insectos, cuyas poblaciones silvestres se han perdido ya en un 40%, advierten.
En esa línea, Tierras Apícolas viene a contribuir al impulso de la necesaria digitalización de un sector envejecido y rural, que se ha de renovar, facilitando vías de cooperación entre propietarios de tierras y productores agrarios con apicultores de toda España, mediante el arrendamiento de fincas de monte para la instalación de colmenares y el alquiler de colmenas para servicios de polinización de cultivos.
También habilita vías de colaboración y negocio entre los propios apicultores, con la compraventa de enjambres, colmenas y reinas; la compraventa de maquinaria y herramientas apícolas de segunda mano; la compraventa de miel, polen y otros productos de la colmena, a granel; la difusión de cursos de formación y actividades de apiturismo para grupos; la difusión de oferta y demanda de empleo apícola, etc.
polinización de campos de colza y mata la uva.