La estadística de salidas de aceites envasados de las empresas de la Asociación Nacional de Industriales, Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (Anierac) muestra que entre enero y marzo se vendieron 26,38 millones de litros de virgen extra (-13,98 %); 19,25 millones de “suave” (-32,50 %); 7,82 millones de “intenso” (-30,48 %) y 6,67 millones de virgen (-10,12 %).
En los primeros seis meses de campaña, además, las ventas de aceite de oliva cayeron el 13,56 % respecto al mismo periodo de la anterior, y se situaron en 133,92 millones de litros.
Las ventas de virgen extra cayeron un 9 % entre octubre y marzo, con 57,40 millones de litros acumulados, según Anierac.
Le siguieron el aceite de oliva “suave” con 46,17 millones de litros, el 16,51 % menos que en los primeros seis meses de la campaña anterior; el “intenso” con 16,41 millones, el 27,17 % menos; y el virgen con 13,93 millones, el 0,53 % menos.
Solo en marzo, las salidas totales se cerraron con 56 millones de litros, de los que 22,63 millones son de oliva, 1,18 millones de orujo y 32,26 millones de aceites refinados de semillas, según Anierac.
En el acumulado de la campaña se vendieron 7,87 millones de litros de aceite de orujo, el 12,35 % menos que en los seis primeros meses de la anterior, de los que 3,35 millones de litros se comercializaron en los tres primeros meses de 2023.
Entre enero y marzo, los aceites refinados sumaron 82,58 millones de litros en ventas, el 0,62 % más que en el mismo periodo de 2022.
De ellos, 60,75 millones de litros correspondieron al aceite refinado de girasol, el 11,70 % menos que en el primer trimestre del año pasado; 20,56 millones, al refinado de semillas, con un aumento del 66,20 %; y 1,26 millones, al resto de aceites de semilla, con una subida del 41,57 %.
En total, las empresas de Anierac han puesto en el mercado 146 millones de litros de aceite en el primer trimestre, el 11,19 % menos que en el mismo periodo de 2022.