La Generalitat de Cataluña ha dado parcialmente por finalizada la Declaración de Emergencia Cinegética en Lérida por la superpoblación de conejos salvajes, con un balance total de 437.585 capturas.
La Generalitat ha dado parcialmente por finalizada la Declaración de Emergencia Cinegética en Lérida por la superpoblación de conejos salvajes, con un balance total de 437.585 capturas.
La cifra es superior a las 301.640 que la administración se había fijado inicialmente como objetivo global desde que declaró la emergencia el pasado 30 de marzo, pero no ha logrado cumplir las previsiones en algunas partes de la zona afectada.
Herramienta administrativa
La declaración de emergencia supone una herramienta administrativa que faculta a la Generalitat a actuar subsidiariamente si los cotos privados de caza no lograban las capturas de conejos que tenía previstas.
Aunque el balance del departamento de Acción Climática es positivo, los objetivos de captura sólo se han cumplido en 67 de las 91 áreas de caza afectadas por la acción del conejo. En estas áreas, que suponen el 74% del total, se han realizado más de 376.000 capturas.
En las 24 restantes, la caza sólo alcanzó 61.000 animales, no habiendo superado en su mayoría el 60% de sus objetivos. En estos casos, la ejecución subsidiaria seguirá siendo ejecutada con la colaboración con de Agentes Rurales o por personal propio del departamento, «hasta la consecución del número de capturas previsto, siempre dentro del plazo máximo del 29 de febrero de 2024».
Áreas afectadas
Todas las áreas afectadas por la declaración de emergencia ocupan una extensión de 1.889 kilómetros cuadrados y están repartidas por las comarcas del Urgell, el Pla d’Urgell, el Segrià, la Segarra, la Noguera y les Garrigues.
Durante la emergencia, la Generalitat ha recibido 1.279 avisos por daños ocasionados por el conejo en terrenos agrícolas. Las comarcas del Urgell y el Segrià son las que recogieron más avisos y, por tanto, las que alcanzaron más capturas.
En cualquier caso, en las zonas donde se alcanzaron plenamente los objetivos, técnicos de Acción Climática recomiendan «continuar cazando y ejerciendo una presión cinegética mayor hasta enero, fomentando métodos efectivos como la caza con uso de hurones, para poder prevenir los daños en los futuros cultivos».
Se permite cazar todo el año
El Govern recuerda que se permite cazar todo el año, «y que a la vez se está cumpliendo con todo el paquete de medidas implementadas para hacer frente a esta problemática».
Éstas se centran en equipos propios y especializados sobre el terreno que trabajan en diferentes acciones como las capturas nocturnas o la colocación de más trampas, que están dando respuesta a comunicaciones de daños; el chipaje gratuito de los hurones propiedad de los cazadores, cuyo precio asume la Generalitat.
Además, la administración catalana insiste que «la Federación Catalana de Caza dispone de una Bolsa de Cazadores especializados en la captura de conejos por toda Cataluña para ofrecer a las sociedades que lo solicitan la colaboración y poder actuar en la zona afectada por los daños en Lleida».
