La concentración en la producción del ovino lechero en España sigue un ritmo creciente, que se ha acelerado en los últimos años como consecuencia del cierre de explotaciones ‘tradicionales’ en muchas zonas y del incremento del tamaño y de la base racial en otras, evolucionando hacia granjas más profesionales y más productivas. Eso ha llevado a que en estos momentos alrededor de un 60% de las ovejas lecheras y un 75% de la producción de leche esté concentrada en solo cinco provincias, dos de Castilla-La Mancha (Ciudad Real y Albacete) y tres de Castilla y León (Zamora, Valladolid y León).
En concreto, estas cinco provincias agrupan alrededor de 3.000 de las 4.450 explotaciones que siguen en activo en el sector del ovino lechero español, y se estima que van a producir este año 2016 unos 360 millones de litros, de los 480 millones totales que se calculan para toda España.
En el caso de Ciudad Real, es la provincia donde el ovino lechero ha experimentado un auge mayor durante los últimos cinco años, hasta el punto de que si mantiene esa tendencia adelantará a Zamora (la primera provincia en número de cabezas) en animales en un breve periodo de tiempo. Contaba a comienzos de 2016 con un censo aproximado de 315.000 ovejas en producción lechera y alrededor de 475 granjas. La media de animales por explotación ronda las 570, la media de producción por oveja/año se sitúa en unos 170 litros, y la media de entrega por granja ronda los 105.000 litros anuales.
Albacete tenía a comienzos de 2016 un censo aproximado de 180.000 ovejas en ordeño y alrededor de 285 granjas. Esto supone una media de 615 animales por explotación, una producción media de 162 litros por oveja/año y una entrega media por granja de 95.000 litros.
Fuera de la región, Zamora sigue liderando el ovino español con un censo de 365.000 ovejas en producción lechera, con alrededor de 800 granjas. El censo provincial se mantiene bastante estable en los últimos años.
