La consejera de Fomento del Gobierno regional, Elena de la Cruz, ha afirmado, sobre la intención hecha pública ayer por el Gobierno valenciano de personarse en las causas abiertas por los recursos de Castilla-La Mancha frente a los trasvases que “está en su pleno derecho de defender lo que creen que son los intereses de los ciudadanos de su Comunidad” de la misma manera que hace el Gobierno de Emiliano García-Page defendiendo por vía judicial “los intereses de los castellano-manchegos”.
“A pesar de las diferencias de opinión, hay puntos que nos unen”, como el aumento de “la potenciación de la desalación que no está usada al cien por cien y la reutilización de aguas depuradas”, ha asegurado la consejera. Según De la Cruz, si ambos recursos se utilizasen a pleno rendimiento en los regadíos “ayudarían a mermar las aportaciones de agua mediante los trasvases”.
Para la consejera de Fomento, el que un gobierno autonómico defienda los intereses de los ciudadanos a los que sirve obedece a una lógica que durante los cuatro últimos años se había quebrado en la región, porque “a Cospedal parecía que le interesaban más los regantes de Murcia o Valencia que los de Castilla-La Mancha”.
Elena de la Cruz ha puesto de relieve el anuncio realizado en Talavera por el presidente de Castilla-La Mancha en relación a la búsqueda de la unanimidad de todas las fuerzas políticas. “Desde que está Emiliano García-Page en la presidencia de esta región, se han tomado las riendas para defender a los ciudadanos de Castilla-La Mancha”, pero también para ofrecer un “diálogo para un gran pacto y que haya la misma unanimidad con respecto al agua que existe en otros territorios y que, en nuestra región, no existe porque la dinamitó Cospedal al plegarse a los intereses de otras regiones”.