El presidente de la Diputación Provincial de Guadalajara, José Manuel Latre, estuvo esta semana en Molina de Aragón participando en los actos programados con motivo de la evaluación del Geoparque de la Comarca de Molina de Aragón-Alto Tajo, que se enfrenta al proceso de revalidación de este sello de la UNESCO.
De esta forma, Latre quiso reiterar su apoyo a este proyecto firmando dos convenios de colaboración: uno con el Ayuntamiento de Molina de Aragón por 30.000 euros y otro por 25.000 euros con la Asociación de Amigos del Museo de Molina; ambos para “potenciar las actividades del Geoparque, para que siga adelante y que sea un impulso no solo en la Comarca de Molina sino también en la provincia en general”.
El presidente, que resaltó públicamente el trabajo de todas las personas implicadas en el proyecto y de los habitantes de la Comarca, mostró su “confianza” en revalidar esta denominación “para seguir trabajando en los objetivos propuestos”. “Desde la Diputación siempre hemos creído en este proyecto, lo hemos apoyado económicamente que es lo que necesitan y hemos ido aumentando esa ayuda”, ha dicho el máximo responsable de la Institución Provincial que tuvo ocasión de intercambiar impresiones con los dos evaluadores de la UNESCO: el profesor Ilias Vaniakos, director del Centro de Interpretación del Geoparque de la Isla de Lesbos (Grecia); y el profesor Li Wei, director del Geoparque de Huangshan, en la provincia de Anhui (China).
El alcalde de Molina y vicepresidente segundo de la Diputación, Jesús Herranz, apeló a la necesidad de “preservar este magnífico territorio” señalando la gran ayuda que suponen las aportaciones económicas de la Diputación Provincial “para continuar con las actividades del Geoparque tanto en el ámbito geológico como cultural”.
El gerente del Geoparque de Molina, Juan Manuel Monasterio, explicó que los resultados de esta evaluación no se conocerán hasta septiembre durante la VIII Conferencia Internacional de Geoparques Mundiales de la UNESCO que tendrá lugar en el Geoparque de Adamello-Brenta (Italia), entre el 8 y el 14 de septiembre. Entonces el Geoparque podría enfrentarse a tres escenarios diferentes: Obtener la tarjeta verde, con lo que seguiría dentro de la Red Global de Geoparques desarrollando su proyecto; la tarjeta amarilla, lo que quiere decir que se deben mejorar algunos aspectos, por lo que se concede un plazo de dos años para realizar las recomendaciones sugeridas; o la tarjeta roja, que significa la expulsión de la Red.
