El alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal, y el presidente de la Academia de Cultura Gastronómica de Castilla-La Mancha, Antonio Mateos, han firmado el convenio de colaboración mediante el cual ambas instituciones desarrollarán actividades con el objetivo de potenciar y visibilizar la gastronomía y el turismo de Cuenca. El acto ha tenido como testigo a Carlos Falcó, marqués de Griñón, vicepresidente de la Real Academia de Gastronomía.
Con una duración de cinco años, el acuerdo recoge que dichas actividades, que se realizarán a demanda de las partes y del sector restaurador, serán de asesoramiento cultural-gastronómico; educativas, académicas y divulgativas, entre otras.
Mariscal ha indicado que esta iniciativa se suma a las que ya se están llevando para promocionar la gastronomía de calidad de la ciudad con el fin de atraer turistas y visitantes que buscan experiencias gastronómicas y que ya superan en gasto al del alojamiento, que en el caso de Cuenca se une a sus grandes atractivos como son la cultura, el patrimonio y la naturaleza.
Antonio Mateos ha destacado el carácter flexible del acuerdo, lo que permitirá su adaptación a lo que demanden en su momento el sector restaurador y los consumidores.
Carlos Falcó ha alabado los recursos turísticos de Cuenca, a la que augura un brillante futuro como receptora de visitantes pues a su excelente historia y gastronomía, se une la comunicación por la Alta Velocidad con las grandes ciudades de España, Madrid y Valencia.
Tras la firma del convenio, el alcalde ha mostrado a los académicos las obras de remodelación y acondicionamiento de las Casas Colgadas para dotar a la ciudad de un emblemático recurso gastronómico.
