Representantes de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) afirmaban recientemente que el sistema de seguros agrarios en España atraviesa un “momento crítico”, advirtiendo de que “cuando se está consiguiendo una mentalización e incremento de las pólizas, el sistema y ciertos intereses hacen que cada vez sean más inaccesibles”.
Desde UPA indicaban que “al parecer, las empresas asociadas a los seguros agrarios llevan varios años consecutivos de pérdidas, motivados por estas condiciones climatológicas y el incremento de asegurados; con lo que la intuición es que no quieren pagar más y de ahí que estén realizando una presión tremenda sobre Agroseguro para incrementar todas las líneas”.
Detrás de este supuesto incremento de pérdidas están los fenómenos climatológicos de los últimos años, con tormentas de pedrisco más fuertes y habituales, inundaciones, heladas en meses poco frecuentes… y otras incidencias como los incendios forestales. Desde UPA indican que ante los efectos del cambio climático los seguros agrarios tienen que ser una herramienta de utilidad para los agricultores.
Ante esta situación, pidió en la Comisión General de la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (ENESA) una “reflexión profunda” sobre la situación de los seguros agrarios en España pues en los últimos cuatro años, los agricultores y ganaderos han tenido que hacer frente a un incremento del precio final de entre un 20 y un 80%, algo “inasumible”.
Desde el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación han planteado la celebración de un Observatorio de la Calidad del Seguro Agrario, en el que podrán analizarse con detalle todas las cuestiones que preocupan a los agentes que componen el Sistema de Seguros Agrarios.
También ha anunciado la creación de un Grupo de Trabajo específico para que actúe como punto de encuentro entre los diferentes agentes que componen el Sistema.
En la última reunión de la Comisión General de ENESA se abordaron asuntos como la situación actual de la siniestralidad a través del seguro agrario, así como la sostenibilidad técnica del sistema, la suficiencia de primas, los ajustes precisos, las reservas de estabilización y el reaseguro a través del Consorcio de Compensación de Seguros.
