El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha destacado que el sector olivarero de Castilla-La Mancha necesita vertebrarse para ser más fuerte y estar organizado, por lo que desde el Gobierno regional se apuesta por la integración de las empresas cooperativas.
Martínez Arroyo ha destacado que este sector es fundamental en Castilla-La Mancha, siendo un cultivo enormemente social y que cuenta en su mayoría con un olivar de secano de bajo rendimiento, tras el cual hay alrededor de 80.000 familias y para el que es necesario un “mayor reconocimiento”, según el consejero.
Es por ello, que en una región como la nuestra, que es la segunda en producción y en olivar ecológico con más de 67.000 hectáreas, se cuente con un sector cooperativo “potente” fundamental “para la vertebración sectorial”.
El titular de agricultura ha recordado que el Gobierno regional está apostando por esa integración comercial, a través de las EAPIR (Entidades Asociativas Prioritarias de Interés Regional) con cinco constituidas en la región, dos de ellas en el sector del aceite como son ÓleoToledo y Montes Norte, y mediante la agrupación de productores, donde se cuenta ya con diez reconocidas.
“Es necesario tener un sector más vertebrado, más fuerte y mejor organizado” ha dicho Martínez Arroyo, donde las cooperativas tienen que liderar estos proyectos porque son ellas las que están “vinculadas a la realidad rural” y son las que constituyen “el colchón de mercado”. Esta fortaleza, ha proseguido, debe existir para que sean capaces de comercializar mejor los productos de calidad que se producen en los diferentes mercados.
A la vertebración del sector hay que unirle, como eje fundamental para el futuro de la industria oleica de Castilla-La Mancha, la innovación. Así, desde el Gobierno regional, ha recordado Martínez Arroyo, se han puesto a disposición del sector agroalimentario un total de 180 millones de euros a través de las línea FOCAL que potencia la calidad diferenciada. En el año próximo, tal y como se comprometió el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se va a sacar una nueva convocatoria para dar certidumbre a las empresas que están haciendo estas inversiones, para que sigan contando con financiación pública y apuesten así por la mejora tecnológica y la innovación.
En esta misma línea, ha señalado el compromiso en particular de las empresas con la innovación en materia de reutilización de agua y depuración, proyectos que se priorizan en esta línea de ayudas. Y en esa dirección es en la que se quiere seguir, en la de la economía circular, para potenciar la relación entre el medio ambiente y el sector agroalimentario.
Así, ha recordado que en este momento en el que se apuesta a nivel europeo por un pacto verde en el que se incluye la PAC, hay que fijar claramente las prioridades y se va a seguir en esa estrategia para fomentar la depuración y la innovación.
Además, el consejero ha puesto de manifiesto un tercer eje imprescindible para el sector del aceite de oliva. Se trata de la defensa por el olivar de bajo rendimiento. Desde el Ejecutivo castellanomanchego se ha trasladado ya al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación la necesidad de que en la próxima PAC exista una ayuda acoplada específica para este olivar que es el “sustento” de muchas familias de la región y que precisan de estas ayudas para poder mantenerlo, ha finalizado.