Un reconocido hidrogeólogo pregunta por qué no hay datos sobre las aguas subterráneas

Francisco Turrión, en un acto celebrado en Villarrubia de los Ojos

La noche de exaltación de los vinos y reivindicación de la gestión sostenible del agua en el campo Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real) fue un éxito de público, en la que el experto hidrogeólogo Francisco Turrión reinvidicó el estudio del agua escondida o subterránea, para cumplir la legalidad y ofreció una nueva propuesta de gestión sostenible en el Guadiana.

El presidente de la cooperativa El Progreso, Jesús Julián Casanova, comentaba como este es un acto solidario, cultural y reivindicativo y “este año dedicado al uso sostenible del agua y donde exaltaremos nuestros vinos también degustándolos que es lo mejor que se puede hacer, y pondremos en valor la concienciación de los agricultores por la sostenibilidad y haremos una llamada de atención a las Administraciones públicas, porque el agua es muy importante para nosotros y para fijación de población en la España vaciada”.

Por su parte, el portavoz de la Plataforma ‘Sin agua no habrá vida’, Francisco Florencio Álvarez, se mostró muy reivindicativo, refiriéndose “a la mala gestión de las políticas hidráulicas, y de la persecución por parte de la Confederación Hidrográfica del Guadiana a los agricultores, pues desde el MITECO se desarrollan políticas de medio ambiente que van en contra de las obras hidráulicas, de regadíos y de crear riqueza en la España despoblada. Por no hablar de los años de retrasos inexplicables en tramitación de cambios de titularidad, modificaciones, etc.”.

Pidió compromiso a los representantes políticos y organizaciones agrarias para solucionar el tema: “No nos merecemos persecuciones ni acoso, hemos estado ayudando en los momentos difíciles de la pandemia, colaborando en los pueblos en la desinfección de calles, somos trabajadores que producimos alimentos para toda la sociedad, y pedimos comprensión y racionalidad a cambio de nuestro compromiso”.

Se quejó de que “las administraciones competentes no cumplen las obligaciones impuestas por la normativa de planificación hidrológica, como terminar la Tubería Manchega y su derivación de 50 hm3, 20 para las Tablas de Daimiel y otros 30 para consumo humano; así como tampoco aporta recursos externos al Acuífero 23, y no da solución al tema de las Explotaciones Prioritarias, eso sí siguen llegando sanciones injustas y desproporcionadas”.

¿Por qué nos esconden las aguas subterráneas?

A continuación, intervino el hidrogeólogo Francisco Turrión, premio de Investigación e Innovación en el Día del Agua en Castilla-La Mancha, para hablar sobre “Las aguas subterráneas en la Mancha Occidental. Nuevas propuestas de gestión sostenible”.

Este experto se refirió principalmente al agua escondida. “La ONU pidió este año en el Día Mundial del Agua, que estas aguas subterráneas no se escondan y se incorporen a la gestión del uso integral del agua. Todos los días los medios de comunicación dan información de sequía y de que no tenemos agua, dando información de los embalses y pantanos superficiales, pero nunca de las aguas subterráneas. ¿Por qué nos esconden esta agua?”.

Otra cuestión “es que dicen que los acuíferos están sobreexplotados, cuando a la luz de la Directiva Marco del Agua no puede decirse que lo estén”, y expuso también como en el 2010 llovió mucho y surgieron de nuevo los Ojos del Guadiana, y la clave está en cómo llovió y qué pasó entonces.

Por último explicó y ofreció “un nuevo modelo de gestión y funcionamiento hidrogeológico de las Tablas de Daimiel y los Ojos del Guadiana, diferente al que nos han explicado hasta ahora, donde lo importante sería que con la ayuda del Estado, alejar focos de bombeos de las surgencias de los Ojos del Guadiana y Tablas, y regar esas mismas zonas pero con agua traída de pozos más alejados, porque así sería sostenible compatibilizar las Tablas de Daimiel con el uso sostenibles de las aguas subterráneas de los Ojos y las Tablas”.

Para el experto “hay muchos intereses en el negocio de la escasez y que todos tengamos el negocio del agua por una tubería, al igual que el del gas por un oleoducto, de manera que quien controla esa tubería o el gasoducto es el que tiene el monopolio, al igual que ocurrió con las placas solares, donde hubo tantas dificultades para que los ciudadanos se autoabastecieran de energía solar, con el agua subterránea ocurre igual, hay mucho interés en que la gente no sea autosuficiente en agua”.

Por eso, según él, “se lanza para ello mucha información confusa, y por eso yo he presentado mis alegaciones al Plan del Guadiana, en las que pido que se cumpla la legalidad, ya que la Ley dice que se mida la presión del agua en puntos representativos piezométricos con pozos que no bombeen, ¿por qué medimos en pozos que bombean, cuando eso nos da una visión distorsionada?, si lo hiciéramos en zonas sin pozos de bombeo nos daría una visión estable”.

Trasvase Tajo-Segura

Dejaba claro Turrión que “el trasvase Tajo-Segura resulta innecesario, y que, con un uso adecuado de los recursos subterráneos, la cuenca del Segura sería autosuficiente y no necesitaría de aportes externos. Hay más técnicos y recursos en las Confederaciones dedicados a las aguas superficiales que a las subterráneas”.

Y se preguntaba también que “según estudios de 2018, se dice que el agua subterránea es siete veces superior a la superficial. Esta agua no consta en la planificación hidrológica. Y si no sabemos el agua que hay embalsada en las masas subterráneas o a qué porcentaje se encuentran las aguas subterráneas embalsadas, ¿por qué decimos que un acuífero está sobreexplotado?”.

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