La plataforma ciudadana SOS Rural ha irrumpido en el escenario político tomando este domingo las calles de Madrid pidiendo cambios y derogaciones de normas que en su opinión afectan perjudicialmente al campo, en la que ha reunido a 1.500 personas, según la Delegación del Gobierno en Madrid, y 25.000, de acuerdo a sus cifras.
La plataforma ciudadana SOS Rural no se va de vacío en la protesta que ha organizado este domingo en Madrid: varios centenares de colectivos del mundo rural y personas a título individual han decidido apoyar su acción, mostrando así cierto músculo a la hora de reinar en la cancha de la protesta rural.
Se han presentado en Madrid con ganas y sus organizadores no se han amedrentado, haciendo saber cuáles son sus reivindicaciones y su posición en contra de las leyes que, entienden, les suponen un problema para seguir su actividad en el medio rural.
Muchas han sido nombradas: la Ley de bienestar animal, para cuya derogación incluso se han recogido firmas; la política hidrológica, que ven ineficiente para asegurar la producción agraria; y mucho protagonismo para la Agenda 2030 porque no comparten su filosofía ni objetivos.
Cazadores, cetreros, transportistas, agricultores y ganaderos han hecho su recorrido desde Atocha a Cibeles, precedidos por varias filas de tractores y de camiones que, convocados por la plataforma nacional en defensa del transporte, han hecho sonar sus bocinas por el madrileño paseo del Prado.
Uno de los cazadores que ha acudido es Juan Gamella, quien ha expresado a Efeagro la necesidad de apoyar estos actos de protesta para defender al mundo rural.
Gamella asegura que la caza, por ejemplo, es una fuente de ingresos «muy importante» para el mundo rural y, sin embargo, el Gobierno la está poniendo «en serio riesgo».
Samuel Prieto es agricultor de Horche (Guadalajara) y se ha manifestado en contra de normativas, como la Agenda 2030, que «nos obligan a cumplir muchos requisitos» hasta «aburrirnos y abandonar».
Se ha quejado de que las leyes que se están aprobando hacen que el mundo rural se sienta «proscrito» y convierte «prácticamente ilegal toda» su actividad.
Además, ha lamentado que los responsables políticos legislen «desde un despacho en Madrid, sin conocer la realidad» del campo.
Alfonso Valenzuela, de la organización política Defensa Social, ha participado junto a un centenar de miembros de este colectivo, llegados incluso desde Canarias para apoyar unas reivindicaciones «justas».
Entre los principales «problemas» que señala están la «competencia desleal» de los alimentos importados desde países terceros o la «falta general de apoyo al sector primario».
Desde la plataforma SOS Rural han criticado las leyes «excluyentes» y «dogmáticas» que ponen en «peligro» el futuro del mundo rural y han dejado clara su intención de seguir trabajando codo con codo junto al partido político holandés BBB, que nació como un movimiento campesino similar, e incluso con los chalecos amarillos franceses.
Convertirse en partido político
Es más, algunos de los colectivos que han tomado la palabra durante los discursos han animado a convertirse en partido político para, desde ahí, derogar las leyes que les afectan.
La manifestación celebrada en un domingo de campaña electoral ha contado con la presencia de la candidata de VOX a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio.
El mundo rural ha vuelto a dejarse oír en pleno corazón de la capital; ahora habrá que analizar el futuro de SOS Rural y si se anima a seguir con acciones de este tipo.
Según han dejado entrever, será la primera de otras grandes concentraciones. Juan Javier Ríos. EFEAGRO
