“Aunque es cierto que en estas circunstancias nos conformamos con que las previsiones de producción hayan subido un poco, estamos en una situación catastrófica para el sector del olivar, tanto de almazara de aceituna de mesa, y esa situación nos va a llevar a tener que tomar medidas excepcionales, sobre todo de índole fiscal, para salvar la situación del sector”, ha explicado el gerente y portavoz de ASAJA-Jaén, Luis Carlos Valero, tras la presentación el aforo del olivar para la campaña 2023/2024.
En este sentido, ha incidido en que por mucho precio que coja el producto por falta de existencias, no se compensa ni el incremento de costos que tiene para el agricultor ni la falta de producto.
Para Andalucía se prevé una producción de 550.600 toneladas de aceite de oliva, un 7,4% más que lo previsto la campaña anterior.
Aun así, al igual que la anterior, es una cosecha corta. Teniendo en cuenta un enlace que en Andalucía es de 232.000 toneladas, las disponibilidades de aceite serán de 782.600 toneladas.
“A pesar de que es un enlace corto, no vamos a llegar a una situación de desabastecimiento. Y si tenemos en cuenta eso, y si tenemos un invierno copioso en cuanto a lluvias, todas esas perspectivas también inciden en el mercado de cara a los precios de los próximos meses”, ha apuntado Valero.
Por provincias
Por provincias, en Jaén se prevé una producción de 215.000 toneladas, lo que supone un 19,5% más que la campaña anterior con un rendimiento graso estimado del 21,2%; en Córdoba 143.000, un 0,1% más; en Sevilla 78.000, un 0,4% más; en Granada 56.000, un 1,3% más; en Málaga 31.000, un 2,3% más; en Almería 13.000 toneladas, un 19,9% más; en Cádiz 7.100, un 4,8%, y en Huelva 7.500, un 0,6% más.