La Comisión Europea ha presentado en el Grupo de Expertos de la Organización Común de Mercados de los Productos Agrarios, celebrado en Bruselas, un proyecto de Reglamento Delegado por el que se prorrogan las medidas excepcionales con el fin de dar apoyo a los productores de determinadas frutas y hortalizas frente al veto ruso a la compra de diverso productos a países de la Unión Europa, más allá del 30 de junio de 2016, fecha en la que finaliza la vigencia de las actuales ayudas.
El proyecto prevé la aplicación de medidas durante un año, siempre que no se hayan agotado los cupos propuestos y siempre que no se haya levantado el veto. Este proyecto establece el mismo tipo de medidas que se han venido aplicando desde el comienzo del veto en agosto de 2014.
En lo que se refiere a los productos que podrán ser objeto de ayuda, se mantienen, entre otros, tomates, zanahorias, pimientos, pepinos melocotones, brócoli o champiñones.
España sigue siendo el segundo en cupos asignados, solo por detrás de Polonia, principal país afectado por el veto ruso.