El secretario general de Agricultura y Alimentación, Carlos Cabanas, ha visitado este martes las instalaciones del matadero de Incarlopsa en Tarancón (Cuenca), una empresa que tiene como actividad principal la producción y elaboración de productos cárnicos.
La mayor actividad de Incarlopsa se centra en el procesado de productos porcinos frescos (de capa blanca e ibéricos), jamón curado de capa blanca, jamones y paletas curados ibéricos, embutidos ibéricos y salchichas cocidas.
En 1978, los hermanos de la familia Loriente Piqueras (Moisés, Clemente, Jesús y Emilio) decidieron crear una empresa familiar con el nombre de Incarlopsa (Industrias Cárnicas Loriente Piqueras, S.A) y con el objetivo de producir y elaborar productos cárnicos porcinos de calidad.
Los cuatro hermanos, con ilusión, tesón, esfuerzo y gran dedicación supieron llevar a cabo un proyecto que hoy en día se ha convertido en una gran empresa; viendo día a día como sus esfuerzos han sido y siguen siendo recompensados.
Primeros pasos
Comenzaron con un pequeño matadero en Tarancón, dónde los animales se sacrificaban y despiezaban siguiendo los rudimentarios sistemas de la época, labor muy ardua y trabajosa.
Aproximadamente fue en los años 80 cuando estos cuatro hermanos vieron la recompensa a su trabajo y dedicación. En esta época hacen que sea necesaria una ampliación de las instalaciones y modernización de las tecnologías; por lo que se decide la creación de un matadero frigorífico, una sala de despiece, una fábrica de embutidos y unos secaderos de jamones aplicando en todas ellas las últimas innovaciones tecnológicas del mercado (instalaciones y tecnología que día a día se van renovando y adaptando a los tiempos y demandas del mercado).
Hoy Incarlopsa, cuyo Consejo de Administración está constituido por miembros de la 1ª y 2ª generación de la familia Loriente, cuenta con más de 181.000 metros cuadrados de instalaciones y más de 2.600 profesionales a los que se les ofrece una formación continua.
Incarlopsa sigue creciendo y este año tiene previsto poner en marcha en Tarancón un nuevo matadero industrial de porcino, con una inversión de unos 35 millones de euros.