Publicado el decreto que regula el Consejo Agrario de Castilla-La Mancha

La Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural ha publicado el Decreto por el que se establece la composición, funciones y el régimen de funcionamiento del Consejo Agrario de Castilla-La Mancha.

Desde su creación, en 1985, el Consejo Asesor Agrario de Castilla-La Mancha ha sido el órgano colegiado de carácter consultivo en la materia agropecuaria y forestal. No obstante, dado el tiempo transcurrido resulta necesario actualizar su composición y funciones a las demandas de la sociedad actual. A tal fin responde la conformación del Consejo Agrario de Castilla-La Mancha como órgano participativo, dada su naturaleza de órgano en el que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, a través de la Consejería competente en materia de política agraria, establece una colaboración en los términos citados con las organizaciones profesionales agrarias, organizaciones sindicales, y con las cooperativas e industrias agroalimentarias de Castilla-La Mancha, en tanto que legítimos representantes de los agricultores, ganaderos y sector agroalimentario de la región.

El Consejo Agrario de Castilla-La Mancha está compuesto por el titular de la Consejería, que ostentará la presidencia; seis vocalías a propuesta de las organizaciones profesionales agrarias que sean de carácter general y de ámbito regional, que formen parte de una estructura a nivel estatal, la cual sea a su vez miembro del Comité de Organizaciones Profesionales Agrarias.

El Consejo Agrario informará sobre proyectos de disposiciones de carácter general en materia agraria y agroalimentaria que hayan de proponerse para su aprobación al Consejo de Gobierno Regional. También informará sobre las medias de la Política Agraria Común (PAC) que sean sometidas a su consideración.

Además, efectuará las sugerencias que se consideren convenientes respecto a aquellas políticas que puedan afectar a las condiciones socioeconómicas de los profesionales agrarios y a la actividad agraria y propondrá políticas que lleven a mejorar y a fomentar el empleo y la formación en materia agraria.

Asimismo, impulsará la participación de las mujeres y los jóvenes en la actividad agraria, así como, de aquellas otras que viven en el medio rural, en todas aquellas cuestiones relativas al sector agrario y agroalimentario.

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