El Diario Oficial de la Unión Europea ha publicado la aprobación de una modificación normal del pliego de condiciones de la Denominación de Origen Valdepeñas, en lo relativo a la variación del porcentaje mínimo de variedades tintas para la elaboración de vino tinto tradicional, que pasa a ser del 85%, frente al 50% anterior.
En esta zona productora se ha elaborado el vino tradicional con mezcla de uvas blancas y tinta, Airén con Tempranillo, desde la constitución de la Denominación de Origen Valdepeñas, pero en la actualidad, recoge la comunicación europea, las tendencias de mercado requieren la elaboración de vinos tintos con mayor carácter varietal de uvas tintas por lo que en la práctica se ha ido reduciendo los porcentajes de uva blanca en la elaboración de estos vinos.
Hasta ahora las normas de elaboración de esta Denominación de Origen permitían mezclar un 50% de la variedad principal que iba a denominar el embotellado y el resto de otras acogidas a la Denominación, generalmente Airén, aunque no se producía desde 2017, con la llegada a la presidencia de Jesús Martín y tras un acuerdo interno del Consejo Interprofesional no se comercializa este tipo de tintos.
La práctica de mezclar al 50% las variedades también se utilizaba para realizar el conocido «clarete» de Valdepeñas, que llevaba mitad de uva tinta y mitad de blanca para bajar el color. Un tipo de vino que hay que diferenciar del rosado que se realiza exclusivamente con variedades tintas, como ha explicado José Carlos Rodríguez, secretario de la Asociación de Sumilleres Manchegos en el programa ‘Entre vinos’, de SER Ciudad Real, presentado por Agustín Cacho Borrás y Antonio Gómez Olmos, editor de www.agroclm.com.
