La Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha ha recuperado ocho variedades de vid autóctonas de la comunidad que estaban a punto de desaparecer. Esta labor fue posible gracias a la investigación previamente realizada por el Instituto Regional de Investigación y Desarrollo Agroalimentario y Forestal (IRIAF).
Entre las variedades recuperadas, cinco ya se encuentran en el registro nacional y pueden comercializarse. Estas son: Churriago, Moribel, Albillo Dorado, Tinto Fragoso y Montonera. Respecto a las tres restantes, han sido las últimas en recuperarse. Se trata de la Sanguina, Castellana Blanca y Maquías, para las cuales desde el Ejecutivo regional se han iniciado los trámites para que ingrese al catálogo del Ministerio de Agricultura.
Al respecto, el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha destacado el trabajo realizado por el IRIAF y sus centros de referencia en general. En específico, del Centro de Investigación de la Vid y el Vino de Castilla-La Mancha (IVICAM).
Para el funcionario, es necesario seguir destinando fondos públicos a la investigación “para conseguir logros como éste, en un sector, el vitivinícola, donde la región es la mayor productora en Europa y en el mundo, con sus más de 450.000 hectáreas de viñedo que representa el 50% del viñedo de España, casi el 14% de la UE y casi el 7% a nivel mundial”.
Cabe señalar que el IVICAM viene trabajando en el registro de distintas variedades de vid recuperadas en la comunidad desde el 2000. Hasta el momento, ha localizado más de 40 variedades, de las que, ocho se han recuperado de forma oficial.
Procedimiento
Luego de que la variedad queda registrada, deberá obtener la autorización de plantación. Una vez conseguido, ya se podrán realizar los sembrados. En Castilla-La Mancha ya pueden plantarse dos variedades que han sido recuperadas: la tinta Moribel y la blanca Albillo Dorado.
Los últimos procesos de solicitud iniciados por el Gobierno regional ocurrieron en julio. La solicitud abarca a la Sanguina, Castellana Blanca y Maquías. Una vez se incluyan en el Registro de Variedades Comerciales, ya podrá iniciarse con el sembrado.
Castilla-La Mancha se ha consolidado como el principal productor de vino en el país.De hecho, ha pasado a concentrar más del 55 % de la producción nacional. Se estima que produce seis de cada 10 litros de todo el vino y mosto español. De ahí se desprende la importancia de la recuperación de las vid.
“La producción de uvas en territorio español ha crecido no solo por el vino, sino por los beneficios del fruto en sí. Las uvas son potentes antioxidantes y son ricas en fibra en hidratos de carbono (17%) de rápida asimilación. También concentran importantes cantidades de vitamina C, y entre sus principales minerales tenemos el potasio, hierro, cobre, calcio, entre otros”, sostiene Katrine Rubæk, cofundadora de la web Sundt.
