El informe del mes de febrero del Consejo Internacional de Cereales (CIC) contempla que debido al recorte de las proyecciones para las cosechas de maíz en el hemisferio sur -y en menor medida a la reducción de las cifras para el sorgo y el trigo- la previsión para la producción mundial de cereales totales (trigo y cereales secundarios) en 2021/22 se ha rebajado en 5 millones de toneladas, estimándola en 2.281, máximo histórico, ya que unas cosechas más abundantes de maíz (+71 m. de t.), trigo (+6 m.) y sorgo (+4 m.) compensarán con holgura la caída prevista de la producción de cebada (-13 m.) y de otros cereales secundarios (-8 m.).
Dado el incremento generalizado de la demanda, sobre todo de cereales pienso, se espera que el consumo total crezca en un 2% para situarse en una cifra récord de 2.286 m. Las existencias acumuladas podrían descender a su nivel más bajo en siete años.
Las proyecciones para la oferta y demanda de trigo en 2022/23 apenas se han modificado respecto a las previsiones iniciales publicadas el mes pasado, y se sigue esperando que tanto la producción como el consumo alcancen cifras récord.
Aunque se prevé ahora que las existencias mundiales al cierre experimenten un ligero aumento interanual, las reservas remanentes de los exportadores principales podrían resultar inferiores a la media.
Alto coste de los insumos
Las primeras estimaciones del Consejo para las superficies mundiales cosechadas de maíz y cebada en 2022/23 señalan pocos cambios interanuales. No obstante, el alto coste de los insumos está dificultando el cálculo de la rentabilidad relativa de los cultivos de primavera, y las previsiones se vigilarán de cerca durante los próximos meses.
Resumen de mercados
Con subidas en todos los mercados, y sobre todo en los de soja y maíz, el GOI del CIC ha ganado un 7%, alcanzando a principios de febrero su cota más elevada en más de nueve años.
