En la Unión Europea no toda la tierra es propiedad del agricultor que la trabaja. Muchos agricultores y propietarios arriendan sus tierras, ya sea como una decisión comercial a corto o largo plazo.
Entre los Estados miembros, Italia se sitúa como el país donde es más caro alquilar una hectárea de tierra cultivable y/o pastos permanentes, con una media de 837 euros en el año en 2020). Y en concreto, en la región de Friuli-Venezia Giulia el promedio fue de 1.714 € por hectárea, según datos de Eurostat (agencia de estadística de la Unión Europea).
Grecia tiene también un importe elevado, ya que la media de este dato en 2020 fue de 448 euros, mientras que en Dinamarca ese valor se coloca en los 557 €.
En Francia, la principal agricultura de la Unión Europea, el precio es de 147 euros como promedio, teniendo en cuenta que se incluyen tanto pastos como tierras arables.
157 euros por hectárea en España
España se sitúa con una media del importe de los alquileres de tierras en 157 euros por hectárea, muy lejos de los datos que registran tanto Italia y Holanda donde ese importe se sitúa, respectivamente, en los 837 y los 819.
En 2020, el alquiler de tierras agrícolas fue más barato en Eslovaquia, con una hectárea que costaba de media 57 euros al año, aunque las regiones más baratas de la UE para alquilar tierras agrícolas fueron Central Norrland y Upper Norrland, en Suecia, ambas con 34 € al año).
En todas las regiones de la UE para las que se dispone de datos alquilar pastos permanentes es más barato que arrendar tierras de cultivo.
