El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, ha confiado este lunes en que los precios de la uva, que ya están por encima del año pasado -ha destacado- puedan subir más a lo largo de la vendimia.
Sobre la campaña de la vendimia, de la que ha dicho que se desarrolla “con normalidad” y que está entrando en lo que se llama la “generalización”, ahora con la recogida de la variedad tempranillo y después con la airén hasta mediados de octubre como ha ocurrido otros años.
Martínez Arroyo ha reconocido, no obstante, que la previsión de la cosecha es “corta” y que se aventuran 20 millones de hectolitros de vino y mosto, que puede ser la cantidad más baja de los últimos 20 años, muy por encima de la media y casi tres millones de hectolitros menos que el año pasado.
Además, ha añadido que las existencias en bodegas son “sensiblemente inferiores”, en torno a dos millones de hectolitros menos de lo que había el año pasado en las mismas fechas.
Pese a la baja previsión de la cosecha y la reducción de la cifra de rendimientos, ha deseado una campaña “rentable para todos” y, en este sentido, ha indicado que los precios, que se acuerdan libremente entre compradores y vendedores según la normativa vigente, van a estar “a la altura de las circunstancias” y que no le cabe duda de que estarán por encima de los costes de producción, tal y como establece la ley.
Por lo tanto, se ha mostrado optimista y ha augurado una campaña de vendimia “muy positiva para todos los eslabones de la cadena vitivinícola”, que permitirá que “Castilla-La Mancha siga conquistando el mundo vendiendo su vino y llegando a 150 países como en este momento”, ha subrayado.
