Tras el recorte del trasvase del Tajo al Segura aprobado por el Gobierno, la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha avanzado que desde el MITECO se impulsarán las desaladoras implicadas en las comunidades del trasvase Tajo-Segura, de manera que se prevé invertir un total de 827,6 millones de euros (386,9 millones en Murcia; 288,4 millones en Alicante, y 152,3 millones en Almería), actuaciones que se licitarán a finales de 2023 y finalizarán antes de junio de 2026.
Además, para reducir el coste energético del agua desalada, el Gobierno prevé poner en marcha un plan para que cada planta desaladora tenga asociado un parque fotovoltaico, de manera que en 2025 podría haber hasta 110 hm3 más de agua en Alicante, Almería y Murcia.
Pero, ¿cuánto pagan los agricultores por esa agua desalada?
El Gobierno central ha anunciado que se fijará en 0,34 euros por metro cúbico el precio del agua desalada.
Desde la Generalitat Valenciana, su presidente, Ximo Puig, ha anunciado que su gobierno establecerá una línea de ayudas a los regantes para rebajar el precio del agua desalada en diez céntimos, es decir, 24 céntimos por metro cúbico.
El “gran objetivo”, ha precisado el presidente, no es la “utilización partidista permanente” del agua, sino que lo que le interesa a la Comunitat es “tener agua para siempre”, y ha asegurado que eso se va a conseguir.
