El presidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page ha insistido este lunes en la necesidad de seguir apostando por aumentar la capacidad de desalación como alternativa al trasvase Tajo-Segura hasta duplicarla, como ya se comprometió el Gobierno central a conseguir en 2022, y se ha referido a las sentencias del Tribunal Supremo que reconocen el incumplimiento de los caudales ecológicos del río a su paso por la Comunidad Autónoma y dan la razón a Castilla-La Mancha.
De igual manera, ha lanzado un mensaje al Gobierno de Murcia para advertir de que, si insisten en plantear un cambio de su Estatuto para blindar el trasvase, desde Castilla-La Mancha se urgirá un nuevo Estatuto de Autonomía “con la intención evidente de que el único blindaje sea para la cuenca natural del propio Tajo”.