El Boletín Fitosanitario de Avisos e Informaciones de la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha informa en su último número sobre la mosca del olivo, indicando que las altas temperaturas del verano y la baja humedad relativa han propiciado que su actividad se haya ralentizado y que las picadas, en un elevado porcentaje, no prosperaran.
Señalan que con el descenso de las temperaturas y aumento de la humedad relativa se dan condiciones más favorables para el desarrollo de la plaga, con lo que se pueden incrementar los daños producidos por la misma.
Hay que tener en cuenta que las lluvias de los últimos días se han distribuido de forma irregular por la región, por lo que siguen encontrándose aceitunas con poco desarrollo, arrugadas y que están empezado la fase de envero, que las hace poco receptivas a la picada de la mosca.
Se recomienda vigilar el cultivo por medio del seguimiento de adultos con trampas y al control de la aceituna picada, mediante la realización de muestreo de frutos para cada zona concreta y sistema de explotación.
Éste puede ser realizado por el propio agricultor, su asesor fitosanitario, técnico de su ASV, además de contar con la Red de Seguimiento de la Mosca del Olivo en Castilla-La Mancha.
En la lucha contra la mosca del olivo se priorizarán siempre las medidas de prevención y/o culturales, seguidas por el resto de medidas alternativas al control químico y por último los medios químicos.
